Definitivamente la vida no sería la misma sin vos. Pienso por qué algunas veces seré tan cabeza dura!. Me doy cuenta que vuelvo a intentar y otra vez te dejo afuera pero siempre termino de nuevo delante tuyo sintiendo esa profunda convicción en el corazón que dice “ es mejor así”. Termina otro año y es raro lo que se siente. Es como si fuera la oportunidad del año para hacer balances, para terminar cosas y/o empezar otras. Algunas veces pienso que pierdo demasiado tiempo.

Sin dudas lo mejor de terminar el año, no importa como haya sido, es que empieza uno nuevo y eso trae un montón de posibilidades nuevas. Quizá para muchos no haya sido el mejor de los años y para otros si lo fue. Para muchos fue el año de los planes y ahora llega el tiempo de las concreciones. Para otros tal vez tristemente sea un año más, aunque la verdad es uno menos. Dicen que los años no vienen solos, se me suman las canas, algunos dolores y alegrías, nada que podamos evitar que suceda, (me niego a teñirme).
¿Y si pudiéramos cambiar algo de este año? seguramente sería una lista interminable de cosas. El futuro ya es presente y se está volviendo pasado.
¡Cuántas cosas pasaron!, risas y llantos, alegrías y tristezas, bienvenidas aunque también hubo despedidas.  Cuántas cosas que pasaron y más allá de lo que sentí se que no estuve solo. Muchas veces en este año te hablé DIOS de un montón de cosas. Te pregunté qué pasaba con algunos sueños que no llegan, te dije que había situaciones que no me hacían sentir bien. Experiencias que si hubieran sido de otra forma quizá no hubieran dolido tanto. Hablé y hablé. Lo admito, alguna vez hasta me enoje. Entendí que hubiera sido mejor escuchar más y hablar menos. Nadie mejor que vos DIOS sabe cual es la mejor forma de vivir.
Hoy te agradezco no haberme hecho caso las veces que le dije de qué forma me parecía mejor a mí y tantas otras donde tal vez tuve que volver a decir hagámoslo a tu manera porque es cierto, es mejor.
Me esperaste muchas mañanas, seguro tenías mucho para decirme pero yo tenía sueño y falté a la cita. Estoy tan felíz de que no seas como yo. Gracias porque siempre me diste otra oportunidad. Se que lo que más estas buscando es mi corazón y eso que está averiado por la vida, por mí y por otros.
Este año te pido sáname, hacéme ver lo que no veo, ayúdame a oírte. Busqué tanto sin encontrar y aprendí una de las mejores lecciones: estás en la intimidad, gracias porque siempre estas en ese lugar, ahí donde estamos solos.
Tomo unas palabras que leí hoy de John Eldredge “Algo esta cambiando. “Estoy empezando a creerlo más que nunca. Me estás cambiando. Me siento menos manejado. Menos compulsivo. Menos codicioso. Y menos vacío.
Siento que quiero quedarme aquí y vivir en tu amor “La verdad termina este año y empiezo el otro sabiendo que definitivamente no seria lo mismo sin vos y como dice mi pastor “lo mejor esta por venir”, estoy convencido que SI.
Gracias por insistir tanto en amarme y no cansarte de repetir hasta que lo entiendo que tengo todo lo que necesito para vivir, Te tengo a vos !

Gustavo J. Ontiveros
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