1. Encuentra el término medio entre el trabajo y la diversión, entre seriedad y risa
2. Cíñete a la verdad,  aunque te deje en mal lugar o te sientas incómodo.  Las mentiras son como fantasmas errantes.

3. Perdona a tus enemigos como parte del precio que pagas por el privilegio de ser perdonado.

4. Pasa  tiempo afuera. Camina. Toma mucho sol y aire puro. Deja de vez en cuando que te caiga algo de lluvia o nieve en el rostro y mánchate las manos de tierra.

5. Habla de tus problemas, errores y sueños con alguien de tu confianza.

6. No tengas en menos la capacidad de Dios para corregir una situación, aun en los casos en que tú no puedas hacerlo. Ten paciencia.