Porque tengo bien planeado lo que deseo para ti. Quiero darte un buen futuro y esperanza. Deja que yo actué y descansa.

Jeremías 29:11

Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes —afirma el Señor—, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza.

Salmos 40:5
Muchas son, SEÑOR, Dios mío, las maravillas que tú has hecho, y muchos tus designios para con nosotros; nadie hay que se compare contigo; si los anunciara, y hablara de ellos, no podrían ser enumerados.

Job 5:9
El hace cosas grandes e inescrutables, maravillas sin número.

Salmos 36:7
¡Cuán preciosa es, oh Dios, tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se refugian a la sombra de tus alas.

Salmos 40:17
Por cuanto yo estoy afligido y necesitado, el Señor me tiene en cuenta. Tú eres mi socorro y mi libertador; Dios mío, no te tardes.

Salmos 71:15
Todo el día contará mi boca de tu justicia y de tu salvación, porque son innumerables.

Jeremías 31:17
Y hay esperanza para tu porvenir–declara el SEÑOR–, los hijos volverán a su territorio.