Hay una sola cosa que resiste el embate de la vida en toda su extensión:
Una conciencia tranquila.

1 Juan 3:21
Si nuestro corazón no nos condena,
confianza tenemos delante de Dios.

Romanos 14:22
La fe que tú tienes, ten la conforme a tu propia convicción delante de Dios. Dichoso el que no se condena a sí mismo en lo que aprueba.

Efesios 3:12
en quien tenemos libertad y acceso a Dios con confianza por medio de la fe en El.

1 Juan 2:7
Amados, no os escribo un mandamiento nuevo, sino un mandamiento antiguo, que habéis tenido desde el principio; el mandamiento antiguo es la palabra que habéis oído.

1 Juan 2:28
Y ahora, hijos, permaneced en El, para que cuando se manifieste, tengamos confianza y no nos apartemos de El avergonzados en su venida.

1 Juan 3:2
Amados, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que habremos de ser. Pero sabemos que cuando El se manifieste, seremos semejantes a El porque le veremos como El es.

1 Juan 3:20
en cualquier cosa en que nuestro corazón nos condene; porque Dios es mayor que nuestro corazón y sabe todas las cosas.

1 Juan 5:14
Y esta es la confianza que tenemos delante de El, que si pedimos cualquier cosa conforme a su voluntad, El nos oye.