Necesitas sanidad. Pero no solo sanidad física, también sanidad espiritual, mental, emocional. Toca el borde de su manto y recibe sanidad.

Recuerda que el vino a darte la sanidad que tu cuerpo, tu alma y tu espíritu necesita. Cree en Él.

Ven, tócame Señor
quiero recibir
tu preciosa unción

Ven, sáname Señor
que un milagro hoy
quiero yo de tí

En el nombre de Jesús recibo sanidad
he tocado el borde de su manto
sano estoy por su Espíritu Santo

En el nombre de Jesús recibo sanidad
he tocado el borde de su manto
sano estoy por su Espíritu Santo

Sano estoy por su Espíritu Santo
sano estoy por su Espíritu Santo

Ven, tócame Señor
quiero recibir
tu preciosa unción

Y ven, sáname Señor
que un milagro hoy
quiero yo de tí, Señor

 

 

En el nombre de Jesús recibo sanidad
he tocado el borde de su manto
sano estoy por su Espíritu Santo

En el nombre de Jesús recibo sanidad
he tocado el borde de su manto
sano estoy por su Espíritu Santo

Sano estoy por su Espíritu Santo
sano estoy por su Espíritu Santo

Sano estoy por su Espíritu Santo
sano estoy por su Espíritu Santo
sano estoy por su Espíritu Santo

Gracias, Señor