“Muchos han sido los días, cuando al despertar, me he sentido solo, como si nadie se interesará en mí y como si no supiera que camino tomar. Esos días han parecido oscuros, sin luz, sin orientación y el desanimo ha tocado a mi corazón.  Pero la promesa de Dios viene y  me infunde aliento y una nueva decisión de vivir en la perspectiva divina, echa fuera toda oscuridad”.  Serafín Contreras .