Hoy, necesito ser libre del auto-engaño, porque he descubierto que el más  grande de todos los engaños, es el auto-engaño.  Dios no permitirá en sus
discípulos el auto-engaño por mucho tiempo.  Serafín Contreras G.

“ Pero sed hacedores de la Palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos” Santiago 1:22.