“No puedo mantenerme firme si soy desobediente a lo que Dios ha dicho y si hago las cosas porque a mi parecen, sin consultar con el Padre.  Hoy necesito estar no solamente seguro que soy un hijo de Dios, pero un hijo obediente que no hago las cosas a mi  manera y mi parecer sino a la manera y al parecer del Padre”. Serafín Contreras G.