Queremos forzar la Voluntad de Dios para que encaje en nuestra corteza cerebral. Tratamos de reducir la voluntad de Dios a los límites escasos de nuestro cerebro. Pero la Voluntad de Dios no es ni lógica ni lineal…a veces es como un espiral o remolino que desciende y que me deja confundido. La razón de sentir eso, es… porque estoy mirando los moldes de este sistema mundial donde nos desenvolvemos.

Serafín Contreras G.

Así ha dicho El Señor, Redentor tuyo, el Santo de Israel: Yo soy Jehová Dios tuyo, que   te  enseña provechosamente, que te encamina por el camino que debes seguir.      Isaías 48:17