“Saludad también a la iglesia que está en su casa. Saludad a mi querido hermano Epeneto, que es el primer convertido a Cristo en Asia.” Romanos 16:5

Iglesia – Un punto más, y les prometo soltar este tema.  L. Coenen dice, “Si uno compara las dos palabras hebreas, se hace claro…que “`edah” es el termino sin ambigüedad y permanente para la totalidad de la comunidad del pacto.  Por el otro lado, “qahal” es la expresión ceremoniosa de la asamblea que resulta del pacto.”

Sólo una de estas ideas se captura en la palabra “ekklesia”, eso es, la expresión ceremoniosa de la asamblea.  Si eso es cierto, entonces “iglesia” ni siquiera es orientada al evento, también es la ocasión formal construida sobre el ritual.  Así que, Dios llama a Su pueblo. Ellos se reúnen (evento) bajo ciertas ordenanzas prescrita (el ritual) para un propósito especifico (la razón de reunión).  Esto es “qahal”.

Pero también está “`edah”.  Para que la iglesia también sea “`edah”, debe pertenecer, no como individuos, sino como unidad completa, a la familia de pacto permanente con Dios.  Permite que esto se instale por un momento.  La conclusión es impactante.  La iglesia como  “`edah” no es para el incrédulo. Si no eres parte de la familia del pacto, no eres parte de la asamblea – ¡y no deberías estar allí!

Esto es una daga al corazón del concepto de la iglesia “que busca amistad.”  Las iglesias “amistosas” no es iglesia desde el punto de vista bíblico.  Es una reunión de una mezcla de mentes y motivaciones.  Es equivalente a la multitud que escuchó la prédica de Pedro en el día de Pentecostés.  El solo tenía un mensaje ¡arrepiéntanse! Todo el resto de la enseñanza, entrenamiento y equipamiento es para la familia de la comunidad del pacto, no para los de afuera.

Ahora quizás comprendamos porque nuestras iglesias son tan tibias y aburridas.  Tenemos la audiencia equivocada.  Cuando mezclamos familia con extraños, ¿Qué clase de señales enviamos? ¿Cómo puedes convocar al llamado de Dios para sus propósitos cuando la mitad de los miembros del grupo ni lo conocen? ¿Cómo podrás tener unanimidad de criterio cuando la audiencia está llena de rebeldes? ¿Qué te hace pensar que Dios haya convocado a esos idolatras a Su evento? En nuestros esfuerzos por cargar a la iglesia de “relevancia,” la hemos destruido.  Ya no nos reunimos a Su llamado para recibir Sus propósitos y actuar como cuerpo unánime ante el mundo.  Nos reunimos en una reunión, llena de toda clase de agendas, enemigos rebeldes a la par de seguidores devotos.  ¿Y esperamos encontrar a Dios? ¿Cuán sensato es eso?

Fin de los puntos.  Comienzo de la capacitación.  ¿Tambaleas al salir del santuario?

Dr. Skip Moen.
www.SkipMoen.com