Por eso eres inexcusable, hombre, tú que juzgas, quienquiera que seas, porque al juzgar a otro, te condenas a ti mismo, pues tú, que juzgas, haces lo mismo. Romanos 2:1.

El hecho de que usted crea algo, no significa que usted está en lo correcto.

Una manera de no juzgar  a otros negativamente, es escoger tener una relación con el corazón de una persona y no juzgar su comportamiento.

La manera en que la gente lo trata a usted es una declaración acerca de quienes ellos son como seres humanos.  Esto no es una declaración acerca de usted y por lo tanto no debes apresurarte a juzgar, sino a entender lo que hay en el corazón de ellos.

El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo, porque de la abundancia del corazón habla la boca.  Lucas 6;45.

No juzguéis para que no seáis juzgados.  Mateo 7:1.

Podemos elevar esta oración a Dios en este momento; 

Señor, siento el haber abierto mis labios para juzgar negativamente a otros y pido tu ayuda, para que pongas guarda a mis labios y no me deje llevar por apariencias, sino que pueda llegar al corazón de otros y no basarme en su comportamiento, entendiendo que muchos viven momentos difíciles,  y toman ciertas actitudes,  que no son motivo para juzgarlos. En el nombre de Jesús te lo pido.  Amén.

Dios te bendiga,

Tu hermana y amiga,

Alva Vargas de Contreras.
www.alvadecontreras.com