¿Qué Harías Tú?
Imagina que eres un niño sentado frente a una mesa. Frente a ti hay un delicioso marshmallow. La persona que te lo dio te dice: “Puedes comerlo ahora o esperar unos minutos y recibirás dos.”
¿Qué harías?
Este es el famoso Test del Marshmallow, un experimento psicológico que ha fascinado al mundo. Pero más allá de la ciencia, esta historia tiene poderosas lecciones para nuestra vida espiritual y emocional. Hoy quiero contarte cómo este sencillo test puede transformar tu forma de ver la tentación, el autocontrol y la fe en Dios.
¿Qué es el Test del Marshmallow?
El experimento del marshmallow fue realizado en los años 60 por el psicólogo Walter Mischel en la Universidad de Stanford. El objetivo era medir la capacidad de los niños para retrasar la gratificación.
Los resultados mostraron algo sorprendente:
- Los niños que esperaron tenían, años después, mejores calificaciones.
- Eran más exitosos en sus carreras.
- Tenían menos problemas de salud y de comportamiento.
En otras palabras, el autocontrol temprano predijo éxito futuro.
“El que es lento para la ira es mejor que el valiente; y el que domina su espíritu, que el que toma una ciudad.” – Proverbios 16:32
Lección Espiritual: Dominar el Impulso
Cuando enfrentamos tentaciones, es como si Dios nos sentara frente a nuestro propio marshmallow. Podemos ceder al impulso inmediato o esperar por algo mejor.
El dominio propio es un fruto del Espíritu (Gálatas 5:22-23), y como todo fruto, debe cultivarse. No es instantáneo, pero se fortalece con práctica.
Ejemplo Personal
Recuerdo cuando estaba luchando con el hábito de gastar en cosas que no necesitaba. Cada vez que recibía mi salario, era tentador comprar algo “para darme un gusto”. Aprendí a esperar unos días antes de hacer compras, y esa simple práctica cambió mis finanzas. Hoy disfruto de mayor libertad económica porque ejercité el autocontrol.
Tres Claves para Fortalecer tu Autocontrol
- Anticipa la tentación
Pregúntate: “¿Qué situaciones me hacen más vulnerable?” Haz un plan para evitarlas o enfrentarlas de forma sabia. - Enfócate en el premio mayor
Recuerda el “segundo marshmallow”. Haz una lista de los beneficios de esperar: salud, paz, relaciones más sólidas. - Invita a Dios a tu proceso
Ora por fuerza y sabiduría. El Espíritu Santo es tu aliado para tomar decisiones que te acerquen a tu propósito.
Aplicaciones Prácticas
- En tu vida espiritual: Dedica tiempo diario a la oración antes de tomar decisiones importantes.
- En tus finanzas: Espera 24 horas antes de compras impulsivas.
- En tus emociones: Cuenta hasta diez antes de responder enojado.
Testimonio Inspirador
María, una joven de nuestra comunidad, compartió que al aprender sobre el autocontrol pudo superar una relación tóxica. Decía:
“Antes pensaba que tenía que reaccionar a todo. Hoy sé que puedo esperar, orar y tomar decisiones más sabias. Mi vida cambió.”
Beneficios de Practicar el Autocontrol
- Mejores relaciones interpersonales
- Más paz interior y menos estrés
- Mayor éxito en metas a largo plazo
- Salud emocional y espiritual fortalecida
- Satisfacción por vivir alineado con tus valores
Reflexión Final
El Test del Marshmallow no es solo un experimento psicológico; es un espejo de nuestra vida diaria. Cada día enfrentamos elecciones que ponen a prueba nuestra paciencia, fe y dominio propio.
Pregunta para ti:
¿Qué “marshmallow” tienes hoy frente a ti que Dios te está pidiendo esperar para recibir algo mejor?
No te pierdas este otro video, donde los que hicieron el experimento buscaron a estos niños pasados los años y encontraron increíbles semejanzas entre los que no se comieron el marshmallow:

Ahora comprendo cuando el señor Jesus dijo: que dejad que los niños vengan a mi y no se lo impidais. porque de tales es el reino de los cielos; para entrar al reino de los cielos sería necesario ser como un niño.
Me llama la atención que han hecho la prueba con niños y niñas de distintas edades, de diferentes padres, con actitudes diferentes; pero hay dos niños que tienen una gran atención en este test. Donde se percive cuando es mayor la tentación y que es muy dificil decir q no, y cuando sin importarnos lo tomamos y nos parece delicioso. Yo lo he vivido y me ha sido dificil decir no, hasta el punto de darle un mordizco al mashmelow; pero a Dios doy gracias porque da la sabiduría y el temor para no comerme por completo el mashmelow(la tentación). Es dificil, duro; pero el decir NO tiene sus recompenzas y las recompenzas de Dios son maravillosas.
Con cariño.
Admiro la naturalidad de la niña que tomó el trozo del elemanto y lo llevó a su boca devorándolo con deleite ,fue muy autentica.sintió el deseo lo comió y se quedó satisfecha.Aveces por temor nos tentamos por algo y llegamos al sufrimiento por reprimirnos y no hacer lo deseado como se vió en la mayoría de los niños.Sería bueno que actuemos con claridad y seamos autenticos en nuestro comportamiento del diario vivir mas allá de si está bien o no el no aceptar tentaciones.Somos humanos y como tal actuamos de ahí que no podemos escapar a tentarnos..
muy bien interesante y me hace pensar y reflexionar mucho con la sangre preciosa de cristo el nos puede librar de las tentaciones porque para el no hAY NADA IMPOSIBLE Y hay que confiar mucho en el
me dejaron sin palabras, realmente la tentacion se te presenta dulce, tierna, y no sabe uno las concecuencia tan graves se se acarrea uno, aunque sea una provadita.
pero cuando no accedemos la recompensa es muy grande.
gracias a Dios por sus vidas.
ME GUSTO MUCHO LASTIMA QUE NO ESTA EN ESPAÑOL, Y ESTOY DE ACUERDO CON ALEXANDRA OSORIO. FENTE A LA TENTACION FINALMENTE UNO ES EL QUE DECIDE SI LO HACE O NO, OJO, LA CUESTION ES DE DESICION YO SIEMPRE HE DICHO LA TENTACION ESTA SOBRE LA MESA… UD DECIDE…
¡LO TOMA O LO DEJA!
DIOS LOS BENDIGA