Si hace una costumbre suya decirle a su hijo o hija que hay algo malo en él o ella, tarde o temprano lo creerá.

    Cada vez que le diga: Eso está mal, dígale cómo hacerlo bien.

Romanos 15:14

Pero estoy seguro de vosotros, hermanos míos, de que vosotros mismos estáis llenos de bondad, llenos de todo conocimiento, de tal manera que podéis amonestaros los unos a los otros.