“Vosotros, pues, también, estad preparados, porque a la hora que no penséis el hijo del hombre vendrá” Lucas 12:40.
El Obrero cristiano y el hijo de Dios necesitamos estar listos para ver cara a cara a Jesús en cualquier momento y en cualquier instante.
Quizá esto no sea fácil, pero cueste lo que cueste necesitamos pagar el precio de estar preparados.
Las batallas más fuertes quizá no sean contra el pecado o las dificultades o circunstancias, pero contra el ser absorbidos por el trabajo de manera que no nos interesemos en estar alertas y preparados.
Jesús siempre llega donde nosotros menos lo esperamos.
Él aparece donde nosotros menos imaginamos. Por lo tanto es necesario que hoy estemos preparados, porque podría ser hoy, cuando él aparezca.
Hoy quiero vivir de tal manera que pueda esperar al Señor en cada instante. Quiero hoy tener la actitud de un niño, quien esperar la llegada de su Padre en cualquier momento.
Si quiero estar listo hoy para esperar al Señor, debo empezar por dejar de ser religioso y ser espiritualmente verdadero.
Cuando solo soy religioso me lleno de formalismo pero la vida ser pierde, si soy espiritualmente verdadero la vida me inunda.
Cuando soy religioso dejo de ser práctico y me vuelvo soñoliento en mi vida espiritual, pero cuando soy espiritualmente verdadero estaré alerta y despierto y además soy práctico en mi vida cristiana.
Quiero estar listo para esperar con una vida espiritual viva y llena de energía… lleno de la energía del Espíritu.
La vida es corta y pasajera, por lo tanto este es el día que Dios me ha dado para vivir lleno de la energía divina y con la esperanza más viva de que el Señor pronto vendrá y quiero estar listo para esperarle.
Sin embargo hoy quiero trabajar como si él no viniera y estar preparado como si llegara ya.
Si mantengo este equilibrio entonces seré un trabajador productivo pero lleno de esperanza… lleno de esperanza en su gloriosa venida, la cual podría ser hoy mismo.
Señor, gracias por darme la salvación y la esperanza de tu venida, quiero hoy trabajar con esmero en tu obra y estar preparado para tu venida con un corazón sincero y humilde.
Gracias por darme la gloriosa esperanza de tu venida y el encanto de tu presencia.
Amén.
Dr. Serafín Contreras Galeano.
www.serafincontreras.com
http://www.facebook.com/SerafinContrerasGaleano
Gracias por darnos la Palabra de Vida cada día, ustedes son el instrumento de Dios Padre y su obra engrandece el nombre del Señor.
Benditos sean
Gracias hermano por sus mensajes son muy buenos para la dirección que uno debe tener para la venida de nuestro Señor Jesucristo, que Dios lo bendiga.
mi mas grande anhelo es verlo a él nada mas!!!!
La vida es corta y pasajera, por lo tanto este es el día que Dios me ha dado para vivir lleno de la energía divina y con la esperanza más viva de que el Señor pronto vendrá y quiero estar listo para esperarle.
Si mantengo este equilibrio entonces seré un trabajador productivo pero lleno de esperanza… lleno de esperanza en su gloriosa venida, la cual podría ser hoy mismo.
Señor, gracias por darme la salvación y la esperanza de tu venida, quiero hoy trabajar con esmero en tu obra y estar preparado para tu venida con un corazón sincero y humilde.
Gracias por darme la gloriosa esperanza de tu venida y el encanto de tu presencia.
Amén.
GRACIAS HERMANO SERAFIN POR LO QUE DIOS HA HECHO DE MI GRACIAS A TU INTERVENCION, HOY CREO ESPERO Y CONFIO, EN MI SEÑOR. QUE DIOS TE BENDIGA HERMANOP SERAFIN.
Interesante mensaje: La verdad es ,que a veces somos simples espectadores. Confundimos la religiosidad con la espiritualidad. y aquí se nos dice, que la Iglesia necesita de cristianos comprometidos, es cierto. a veces creemos que se es cristiano simplemente por pertenecer a una u otra religión o comunidad, cuando no se es por vocación o por convicción… y ésto, lo demostramos en un estado de inercia en nuestra vida como tal. La iglesia necesita de verdaderos cristianos que trabajemos hombro a hombro en todos los aspectos, con nuestros Representantes para sacar adelante el más grande proyecto…¡La evangelización! Muy puntual este artículo Hermano Serafín. Dios le bendiga y fortalezca en su grandiosa misión. Que algún día entendamos que todos, somos Iglesia.