Nunca olvides que las cargas pueden hacerte mejor de lo que imaginas: más fuerte,
más valiente, más amable, y más amoroso de lo que hubieras sido de no ser por ellas.
1 Pedro 5:10
Y después de que hayáis sufrido un poco de tiempo, el Dios de toda gracia, que os llamó a su gloria eterna en Cristo,
El mismo os perfeccionará, afirmará, fortalecerá y establecerá.
Mateo 11:30
Porque mi yugo es fácil y mi carga ligera.
1 Juan 5:3
Porque este es el amor de Dios: que guardemos sus mandamientos, y sus mandamientos no son gravosos.
Salmos 119:28
De tristeza llora mi alma; fortaléceme conforme a tu palabra.
2 Corintios 4:17
Pues esta aflicción leve y pasajera nos produce un eterno peso de gloria que sobrepasa toda comparación,
espero seguir recibiendo vuestras reflexiones en mi correo.gracias por la atención recibida.
lei el mensaje acerca de saber llevar las cargas que se nos presentan a diario,gracias por la reflexión recibida.Bendiciones.
Gracias por los mensajes reconfortantes !
Fortalecen mi vida espiritual!