“Los ojos de Jesús, buscan  a sus  siervos y en medio de una atmósfera indiferente y gritos de triunfalismo y éxito, su voz se levanta para decir:  “Entra en la nueva dimensión de mí Espíritu ”
El deseo del Señor es el de renovación de sus ministros. Si queremos aún ver una GLORIA más resplandeciente, necesitamos anhelar su renovación”. Serafín Contreras G.