“¿Los ha rescatado el Señor? ¡Entonces, hablen con libertad! Cuenten a otros que él los ha rescatado de sus enemigos. Pues ha reunido a los desterrados de muchos países, del oriente y del occidente, del norte y del sur.”
Salmos 107.2-3
Nunca me han arrestado, pero a algunos de mis mejores amigos sí, y me han contado sus experiencias. Puedo intentar imaginarme como se siente el ser atrapado haciendo algo malo y ser llevado a la cárcel. Puedo tratar de imaginarme la vergüenza que sentiría y la esperanza de que alguien pague la fianza. Imagino que al ser liberado de esa celda tendría una mezcla de emociones. Me alegraría de estar libre, pero avergonzando de ver el rostro de quien me libró, por lo que hice. El problema con ser libre o redimido es que debes ser librado o redimido de algo. A menudo, ese “algo” es el resultado de elecciones pobres o errores y consecuentemente no somos rápidos para hablar sobre eso. Preferimos dejar atrás esa parte de nuestra vida. Pero si no hablamos honestamente de lo que hemos sido redimidos, entonces la redención no es tan importante.
De igual manera en la interacción de Dios con nosotros. Todos hemos cometido errores, algunas personas peor que otras y algunos errores peores que otros. En esos momentos oscuros, cuando estamos sintiendo las consecuencias de nuestros errores, Dios llega, nos da una oportunidad de vivir diferente y nos redime de ese pasado.
Es común entonces, que nos encante hablar sobre el amor de Dios y Su redención, dejando por fuera aquello de lo que El nos ha redimido. Pero es en la profundidad de nuestra oscuridad que la luz de Dios brilla mas fuerte. En nuestra historia personal, debemos incluir la salvación radical que Dios nos trajo. No podemos temerle a vernos mal o sonar como alguien que realmente metió la pata. Metimos la pata y fue precisamente allí donde Dios nos encontró y de donde rescató!
No sé como fue tu pasado. Puedo imaginar que esta lleno de errores, al igual que de circunstancias desafortunadas. Puede que hayas ido a prisión o a la cárcel. Puede que hayas herido a la gente. Puede que hayas hecho cosas de las que te avergüenzas. Puede que te hayan lastimado: violación, golpeado, abandonado. No escondas esa parte de tu pasado. Explica claramente a los demás, la profundidad de donde Dios te rescató.
Hoy, no te escondas o huyas de oportunidades en las que puedes decirle a otros sobre qué tan poderosa es la gracia de Dios. Al contar tu historia a los demás, ellos obtendrán esperanza para sus propias circunstancias. No minimices tu pasado, porque al hacer eso no estas contando la verdadera magnitud del amor de Dios en el presente.
Robert & Rebecca Vander Meer
La Arboleda.net
Ezekielsgrove.com
Tan cierto esto ( en la profundidad de nuestra oscuridad que la luz de Dios brilla mas fuerte. En nuestra historia personal, debemos incluir la salvación radical que Dios nos trajo. No podemos temerle a vernos mal o sonar como alguien que realmente metió la pata. Metimos la pata y fue precisamente allí donde Dios nos encontró y de donde rescató ) en lo personal ; tan difícil muchas veces compartirlo sabiendo que puede ser de esperanzas para otras almas , por miedo al rechazo al que dirán .. y Dios y su misericordia han sido tan profundas e infinitas para mi vida y mi familia. Gracias RENUEVO DE PLENITUD por recordármelo. Dios les siga bendiciendo.
realmente la gracia de dios nos alcasa y gracias a su amor y misericordia somos redimidos del pecado
me voy a referir al título de esta nota,no me siento identificada con ella,porque,nací y viví con mis padres hasta el momento de mi casamiento,1970,luego dediqu´mi vida a los hijos que mi marido y dimos vida,(3) dos varones y una hija, todos cresidos en gracias de Dios.Todo lo conseguido fué puramente nuestros esfuerzos y nunca dañamos a nadie.ASI que no tengo porqué arrepentirme de nada, Eso es unas de las cosas que han hecho que me he retirado de la iglesias, que todo el tiempo te quieren hacer responsable de los que ellos no hacen,mejorar la comunicasión entre personas y no devatir temas realmente importantes para la convivencia humana,sino,que onservan ideas muy ortodoxas, culpabilizando siempre a las mujeres de los males de esta tierra. A tal punto que en la Biblia no se ve ni una prticipación importante de algunas de las mujeres de esas épocas,hasta parecen que eran mudas.
LE DOY GRACIAS A MI DIOS, SIEMPRE Y NUNCA ME CANSARÉ DE DARLE LA HONRA Y LA GLORIA… PORQUE EL PERDONÓ MIS PECADOS Y SANO MIS HERIDAS… Y AHORA TENGO SU PAZ Y SU AMOR ETERNO…GRACIAS PAPA DIOS
LE DOY GRACIAS A MI DIOS TODOS LOS DIAS, A CADA MOMENTO, Y NUNCA ME CANSARÉ DARLE LA HONRA Y LA GLORIA… PORQUE EL ES BUENO Y PARA SIEMPRE ES SU MISERICORDIA.. AMEN Y AMEN..