“Gran parte del conocimiento de las cosas divinas se nos escapa por falta de fe”. Heráclito
Uno de mis pasajes favoritos de la Biblia está en Hebreos 11, es el capitulo de la fe y lo que llama poderosamente mi atención es que por la fe muchas personas…conquistaron reinos, hicieron justicia y alcanzaron lo prometido…
¿Por qué no tengo éxito? ¿Por qué no estoy alcanzando mis sueños?
Una de las razones es por nuestra incredulidad, por la duda, por el miedo, por nuestra poca fe en las cosas que emprendemos. Es poderoso lo que dice Jesús: “Les aseguro que si alguno le dice a este monte: “Quítate de ahí y tírate al mar”, creyendo, sin abrigar la menor duda de que lo que dice sucederá, lo obtendrá.”
Nuestros sueños no podemos alcanzarlos cuando en nuestro corazón no hay fe. Si tu no crees en tus sueños nadie más va a creer en tus sueños. Si tú dejas que los temores crezcan en tu vida, tu mismo te habrás impedido de lograr tus sueños.
El verdadero éxito viene de adentro, de lo interno y se manifiesta en lo externo. La batalla comienza desde adentro, todo lo ganas desde el corazón. Tú debes estar convencido de que ese sueño que Dios puso en tu corazón es real. La fe es saber que lo que esperas ya está hecho. Es una convicción, no una exageración. No se trata de convencer a los demás, es estar convencido de que puedes lograrlo. Es tomar acción por lo que esperas que suceda.
¿Qué cosas esperas que sucedan en tu vida hoy? ¿Qué pasos vas a dar para que sucedan?
Es tiempo que dejes de pensar con una mentalidad de langosta, y comiences a pensar con una mentalidad de gigante que puedes alcanzar la tierra prometida. Les he escrito que somos más grandes de lo que pensamos, que Dios nos diseño para ganar, para grandes cosas.
Si hay cosas que no estás logrando en tu vida, en tu matrimonio o en tu trabajo o negocio probablemente es la falta de fe, la duda te asalta y no puedes avanzar. La fe autentica debe ser definida y libre de toda duda. En el momento que dudes deja de ser fe.
Hay una reflexión que seguramente las has leído más de una vez:
En un pueblito de zona rural en los años 50, se produjo una larga sequía que amenazaba con dejar en la ruina a todos sus habitantes, debido a que subsistían con el fruto del trabajo del campo. A pesar de que la mayoría de sus habitantes eran creyentes, ante la situación límite, marcharon a ver al pastor de la iglesia y le dijeron:
– “Pastor, si Dios es tan poderoso, pidámosle que envíe la lluvia necesaria para revertir esta angustiante situación.” - “Está bien, le pediremos al Señor, pero deberá haber una condición indispensable.” - “¡Díganos cuál es!”, respondieron todos. - “Hay que pedírselo con fe, con mucha fe”, contestó el pastor. - “¡Así lo haremos, y también vendremos a los cultos de la iglesia todos los días!”
Los campesinos comenzaron a ir al templo todos los días, pero las semanas transcurrían y la esperada lluvia no se hacía presente.
Un día, fueron todos a enfrentar al pastor y reclamarle:
– “Pastor, usted nos dijo que si le pedíamos con fe a Dios que enviara las lluvias, El iba a acceder a nuestras peticiones. Pero ya van varias semanas y no obtenemos respuesta alguna.” - “¿Han ustedes pedido con fe autentica?”, les preguntó el pastor. - “¡Sí, por supuesto!”, respondieron al unísono. - “Entonces, si dicen haber pedido con Fe autentica… ¿porqué durante todos estos días ni uno solo de ustedes ha traído el paraguas?”
Si tenemos fe debemos mostrar nuestros hechos.
Nada es imposible cuando sabes que es lo que quieres, cuando sabes como llegar allí y cuando tienes la fe para creer que vas a alcanzar lo prometido.
Tú puedes conquistar reinos, tú puedes alcanzar lo prometido pero tienes que creerlo, tienes que dejar de ser un pollo y elevarte como las águilas. Recuerda que: “Los planes que Dios tiene para ti son de bienestar”.
“La Fe no es simplemente creer en algo; es creer en Dios, es descansar en Él confiando en su Palabra.” Edward M. Bounds
Hoy es el mejor día para comprometerte contigo mismo, a cultivar y hacer crecer tu fe. Por medio de la fe puedes obtener resultados extraordinarios.
En amor y liderazgo,
Pedro Sifontes
Coach Personal
info@liderazgocreativo.com
www.liderazgocreativo.com
No temas, pues no serás confundida; y no te avergüences. Isaías 54:4.
No seremos avergonzados de nuestra fe.
Los escépticos pueden combatir las Escrituras sobre las cuales basamos
nuestras creencias, pero el Señor demostrará de un modo cada vez más evidente que en este libro no hay error, ni exageración, ni omisión.
Ninguna deshonra hay en ser un creyente sencillo; la fe que mira únicamente a Jesús es una corona de honor sobre nuestra cabeza y que vale más que todas las condecoraciones que llevemos sobre nuestro pecho.
No seremos avergonzados de nuestra esperanza.
Esta se cumplirá conforme a la promesa del Señor.
Seremos alimentados, guiados, bendecidos, y fortificados.
Nuestro Señor vendrá y cesarán los días de nuestro luto.
¡Cuánta será nuestra gloria en el Señor que nos ha dado una esperanza viva y que después nos ha puesto en posesión de lo que esperábamos!
No seremos avergonzados de su amor.
Jesús es el ser más digno de nuestro afecto y jamás nos avergonzaremos
de haberle entregado nuestro corazón.
La visión gloriosa de nuestro Bien Amado justificará nuestra entusiasta adhesión
a su persona.
Nadie censurará a los mártires por haber muerto por su causa.
Mientras los enemigos de Cristo se verán cubiertos de vergüenza eterna, los que aman a Jesús serán honrados por todos los santos porque prefirieron el vituperio de Cristo
antes que los tesoros de Egipto.
Es por eso que no importa lo que esta sociedad haga o el enemigo intente no seré avergonzado.
Señor , Gracias por levantar mi rostro resplandeciente por tu gloria y justicia. A pesar de las Circunstancias, hoy se que no seré avergonzado. Amén.
Charles Spurgeon.
Libro De Cheques Del Banco De La Fe.
Me es grato ponerme en contacto con ustedes y agradecerle por todo el material que ponen a nuestra disposición, tanto en lo personal como para poder compartirlo en encuentros y reuniones. Precisamente este tema me dice mucho respecto de la fe, en realidad una no tiene fe como la que nos pide Dios, tiene sólo ataques de fe que se desvanecen con los quehaceres y problemas diarios. Una vez más gracias y me encanta encontrarles cada mañana en mi correo. Rossana
Hermano Pedro S. gracias por este escrito acerca de lo que es la FE a la luz de las sagradas escrituras. Me ha hecho pensar en mi persona y como aplicarla a mi vida, para crecer más. Yo he visto la mano poderosa de Nuestro Amado Salvador en mi vida, y declaro que la seguiré viendo, no porque lo meresca, sino porque SOLO DIOS ES BUENO. Ricas bendiciones para usted!!!
Les envio bendiciones y continuen ayudandonos ya que atraves de este maravilloso ministerio transforman vidas para mi es un valioso recurso para continuar creciendo espiritualmente les envio muchas bendiciones del poder de una lectora creyente en Dios , gracias al padre y a cada uno de ustedes por continuar extendiendo el reino de Dios . Con carino especial nina.
Buen día. Dios les bendiga grandemente.
Cuando la Voz de Dios se hace escuchar a traves de sus profetas, el corazon se regocija de alegría al saber que Dios está hablando.
Muchas veces el no dice lo que queremos escuchar, pero tener fé es saber que cuando el habla es porque le tenemos fé a el. Dios es grande y nunca desampara a los que les amamos, a los que le aman.
Gracias por su alentadora palabra y es bueno saber que Dios dijo. Todo lo que hagamos que lo hagamos como si fuera para Dios. Eso se llama tener fé y no hay margen a que fallemos porque estamos agarrado del Grande el, el que solo se mueve a tu favor cuando la fé es genuina.
Gracias y que Dios les continúe bendiciendo.