Una vez un artista estaba pintando la bóveda de un templo, y con frecuencia daba unos pasos hacia atrás en el andamio, para contemplar su obra. Se encontraba tan absorto contemplando su trabajo, que no se había dado cuenta de que iba a caer en el pavimento que estaba a gran distancia del andamio.
Otro pintor, hermano de aquel, viéndolo en peligro y comprendiendo que una palabra podría apresurar su caída, arrojó una brocha sobre el cuadro que contemplaba el artista que estaba en peligro. Este pintor, sorprendido y enojado, violentamente se dirigió hacia adelante: así se salvó de una caída que hubiera sido mortal. Así también, Dios algunas veces destruye las halagadoras esperanzas de nuestro corazón, para advertirnos el grave peligro en que estamos por causa del pecado, y para salvar nuestras almas.—Peloubet. Lerı́n, A. 500 ilustraciones
Muchas veces no entendemos que por estar tan absortos en nuestros propios logros, exitos y ambiciones damos pasos en falsos que podrían destruir nuestras propias vidas y Dios en su misericordia interviene para despertar nuestra conciencia dormida. A veces él lanza su brocha contra el cuadro de nuestra vanidad para demostrarnos que nos ama y que más que estar interesado en nuestros éxitos , él está interesado en nosotros como sus hijos.
La proxima vez que su brocha manche tu cuadro, dale gracias a Dios, porque quiza te libró de caerte del andamio.
Génesis 32:10 Menor soy que todas las misericordias, y que toda la
verdad que has usado para con tu siervo; que con mi bordón pasé
este Jordán, y ahora estoy sobre dos cuadrillas.
Exodo 33:19 Y respondióle: Yo haré pasar todo mi bien delante de tu
rostro, y proclamaré el nombre del Señor delante de ti; y tendré
misericordia del que tendré misericordia, y seré clemente para con
el que seré clemente.
Números 14:18 El Señor, tardo de ira y grande en misericordia, que
perdona la iniquidad y la rebelión, y absolviendo no absolverá al
culpado; que visita la maldad de los padres sobre los hijos hasta
los terceros y hasta los cuartos.
Que hermosa reflexión. Estaba triste por cambios drásticos en mi vida. Haber salido si esperarlo de mi zona de confort… inesperadamente me sentí perdida en el abismo. Pero tras leer esto fue como un bálsamo para mí. Y creo firmemente que si mi Padre celestial me saco de tal lugar es por algo mucho mejor. En El espero❤
Efectivamente el frutuo cercano será así, y ya estamos empezando con el dichoso Peak Oil. En cuanto a la novela me pareció entretenida y creadora de ambiente y el final, bueno el perro de la familia de acogida supongo que es la clave de que es un final feliz. Antes escucharon un perro, luego encuentran una familia con uno, digo yo que si fueran antropófagos serían un tanto rarillos, y no se jamaron el chucho.