“El mejor regalo que uno puede dar es el perdón.” Pedro Sifontes
El perdonar es muy importante si tú quieres vivir una vida extraordinaria. Me he encontrado con muchas personas atrapadas en sus culpas, pesares y en sus rencores, muchos de ellos queriendo poder perdonar pero “no pueden”, están luchando consigo mismo, y pasa porque sus expectativas son equivocadas acerca del perdón.
Es cierto que la vida no es justa, que hay gente que lastima, que te han hecho daño y que no merecen tú perdón. Pero, ¿Será eso lo que Dios quiere para tu vida? ¿Será que el quiere que vivas amargado?
Entiende que el rencor no es un sentimiento agradable. Cada vez que piensas en la persona o en la circunstancia que lo provocó, vuelves a experimentar todas esas sensaciones desagradables como: ira, impotencia, frustración, dolor, ansiedad… todo eso es basura toxica que te causa estragos físicos en tu salud y emocional en tu mente.
Pero si Dios no quiere que viva amargado, ¿Qué hago con esas heridas? ¿Cómo saco este rencor? ¿Cómo perdono?
Es importante entender lo que es el perdón, y lo que no es.
1. No es un asunto de emociones. No tenemos que esperar sentir alguna simpatía por el ofensor, para poder perdonarle.
2. No es excusar. No significa aprobar lo que hizo esa persona. No necesitamos estar de acuerdo con el ofensor ni tenemos que buscar excusas por su comportamiento.
3. No significa confiar nuevamente en el ofensor. Esto es particularmente importante cuando el ofensor no se arrepiente (y esto es muy frecuentemente el caso). El perdón, en este caso, no significa que la relación personal sea restaurada. La relación es restaurada solamente cuando el ofensor se arrepiente sinceramente, pide perdón y hace restitución. Mientras no sucede esto, no hay razón para confiar en él, ni mucho menos tener una relación amistosa con él.
4. No es olvidar. Algunos piensan que no han perdonado realmente porque siguen sintiéndose heridos y no pueden olvidar la ofensa. El “olvidar” de Dios significa que El ya no recordará estos pecados “en contra de nosotros” (Salmo 79:8), o sea, ya nos utilizará para acusarnos.
5. Perdonar es una decisión. Es un asunto “legal”. Perdonar significa “soltar” o “condonar una deuda”.
6. Perdonar es un proceso. Nunca es bueno presionar a alguien: “Perdona no más” – esto lleva solamente a un perdón muy superficial.
En algunos casos tendremos que perdonar muchas veces; cada vez que la herida surge nuevamente en nuestros recuerdos. Jesús nos enseñó a perdonar “setenta veces siete” (Mateo 18:22).
El perdonar es algo que haces por ti mismo, no por la persona que te hirió. Cuando perdonas te liberas a ti mismo de poder volar, vivir a plenitud y con salud de mente, cuerpo y espíritu.
“Abandonen toda amargura,… y perdónense mutuamente, así como Dios los perdonó a ustedes en Cristo.” Efesios 4:31,32
El mejor regalo que tú recibiste si eres cristiano fue el perdón de Dios y si Dios te ha perdonado, Dios espera que tú perdones. Tu nunca tendrás que perdonar a otra persona, más de lo que Dios ya te ha perdonado. Y si aun no eres cristiano tú también puedes recibir el regalo del perdón por medio de Jesucristo para que puedas otorgar el perdón. Recuerda: “Nadie puede dar aquello que no tiene y nadie debe recibir aquello que no quiere”. Tú no puedes permitir que las personas te hieran. Las personas no te pueden dañar si tú no les das el permiso. Dígale adiós a sus rencores y comience a vivir la vida extraordinaria.
En amor y liderazgo,
Pedro Sifontes
Coach Personal
info@liderazgocreativo.com
www.liderazgocreativo.com
Me parece que este mensaje lo estaba necesitando.
Mi decisión de perdonar está, pero probablemente deba perdonar muchas veces, para soltar definitivamente al ofensor.
Quiero perdonar y ser libre para disfrutar de la vida, y no permanecer en la amargura que ese herida me causó.
Gracias Pedro por tu consejo.
Un abrazo en Cristo
Sandra
Me pasa igual, aveces creo que ya lo he perdonado, vuelve y me hiere y comienzo a sentir distracción e impotencia, me da deseo que desaparezca de una vez de mi vida.
Es que esta persona no solo revivo la herida que él me causa, sino que también me hace volver los daños que viví en mi niñez.
Quiero avanzar en Dios y creo que esto es lo que me está paralizando, siento que avanzo y ya luego vuelvo a caer de picado, mi fuerza se esfuman. Necesito verdaderamente ayuda y el rostro de Dios más en mi vida
la verdad es que esta reflesion me callo del cielo estaba ya x no seguir en los caminos pero despues de leer este mesaje ya no pienso de la misma manera gracias señor x mandar a estas personas q trabajan dia a dia para personas como yo puedan cambiar su manera de pensar asi como fue de edificasion para mi espero q para cada uno q lea esta material sea edificado grasias seños te amo x q tu me perdonastes primero ami jesusssss te amooooooo soy patricia marin
Las personas no te pueden dañar si tú no les das el permiso.
ah que se refiere esta frase no la entiendo por lo demas gracias es muy interesante el tema
Es muy cierto lo expresado, anteriormente, pero tambien es muy cierto que el Perdon, cuesta mucho darlo, pero este mensaje me ha mostrado que puedo hacerlo, y encontrar la paz interna que necesito gracias, estos mensajes me han ayudado explendidamente, le dios muchas gacias por todo lo que hacen por mi dia a dia. se les quiere y respeta Adelante.
El Señor nos responde de infinitas maneras, solo hay que saber hallarlas, en este caso a mi me respondio con este mensaje,en esta tarde le hable al Señor sobre como me sentia, lo que vengo cargando hace tantos años, a pesar de que no es la primera vez que le hablo de esto,le pedi respuesta, y me sorprendio al revisar mi correo que este sea el mensaje del dia para mi.
La verdad que no es facil perdonar,mas aun cuando tenemos la idea equivocada de pensar que debemos “sentir” el querer perdonar.
Simplemente es un mandamiento del Señor.
Aun asi, habemos personas que nos cuesta obedecer eso.
Tengo este problema de rencor hace años hacia una familia en particular y eso me esta haciendo cada vez mas daño.
Le pido a Dios que este mensaje de fruto en mi corazon y que finalmente pueda perdonar para tener esa vida extraordinaria que deseo.
Dios les Bendiga grandemente.