Mary Susan y Brandon, no han podido tener un bebé, por más tratamientos, siempre todo fallaba.

Y una completa desconocida, les da el regalo más hermoso y a la vez más difícil.

Juzgarlos es muy fácil, pero la realidad es que estar en sus zapatos es muy difícil.

Muchas veces, Dios responde nuestras oraciones de la manera más extraña y diferente y hace que se rompan paradigmas.

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1 Samuel 1: 27-28
Le pedí al Señor que me diera este hijo,
y él me lo concedió.
Yo, por mi parte, lo he dedicado al Señor,
y mientras viva estará dedicado a él.