Hace algunos años, en los para-olímpicos de Seattle, nueve concursantes, todos con alguna discapacidad física o mental, se reunieron en la línea de salida para correr los 100 metros planos. !Qué esfuerzo! Pero ahí estaban frente a la línea de competencia.
Al sonido del disparo todos salieron, no exactamente como bólidos, pero con gran entusiasmo de participar en la carrera, llegar a la meta y ganar.
¿No nos pasa acaso en la medida que enfrentamos un negocio, un conflicto que resolver, un problema a solucionar que nos paramos frente a la línea?
Todos corrieron, menos uno, que tropezó en el asfalto, dio dos maromas y empezó a llorar. Los otros ocho oyeron al niño llorar, disminuyeron la velocidad y voltearon hacia atrás. Todos dieron la vuelta y regresaron…
¡Todos!
Eso sí no nos pasa… Corremos sin importar si caen a diestra y siniestra.
Una niña con síndrome de Down se agachó, le dio un beso en la herida y le dijo “Eso te lo va a curar”. Entonces, los nueve se agarraron de las manos y juntos caminaron hasta la meta.
Todos en el estadio se pusieron de pie, las porras y aplausos duraron varios minutos. La gente que estuvo presente aún cuenta la historia.
¿Por qué?, ¿acaso hemos olvidado que fuimos creados para tener significado y para ayudarnos unos a otros?.
Y algo aún más increíble es que dentro de nosotros sabemos una cosa: que lo importante en esta vida va más allá de ganar nosotros mismos.
Lo importante en esta vida es ayudar a ganar a otros, aún cuando esto signifique tener que disminuir la velocidad o cambiar el rumbo.
¿Qué esperas para darle una mano a tu pariente que ha sido tomado como el menos?
¿Qué esperas para hacer una llamada a casa y decirles a los tuyos que cuenten contigo?
Qué bueno que a tu compañero de trabajo le ofrezcas de tu tiempo para ayudarle en esa tarea que lo mantiene estresado.
Qué bueno que sin ir muy lejos mires en tu casa, en tu esposa y en tus hijos la oportunidad para darles un beso y decirles: Esto te puede curar y luego como los niños de Seatle, agarrarse de las manos y buscar la meta.
Solo no lo lograrás.
Enviado por Bernardo Porras
Así que en todo traten ustedes a los demás tal y como quieren que ellos los traten a ustedes. Jesús
(Mateo 7:12).
Gracias Dios porque me has dado las fuerzas para seguir cada dia hacia adelante… sin importar esos hoyos q encuentro en mi camino. A veces la gente dice q hace lo mejor por ti, q te desea lo mejor, pero solo padecen del yoismo… a cada segundo mencionan el “yo”, y sacan en cara lo q han hecho por ti. Pero mi Dios… en estos momentos los pongo en tus manos para q cambies su corazon y lo moldees a tu forma. Transformalos mi Dios…
yo pensaba que estabamos en un gran equipo en mi comunidad y resulta que no !! por una sola persona han surgido un sin fin de comentarios negativos y peor algunos hacia mi persona, trato de dar lo mejor de mi, y crei ciegamente en esa persona inestable, que aun sige apartando a la gente de mi colonia en nuestra contra y todo por dinero y malos comentarios pero todavia existe gente decente que sige en pie trabajando en construir nuestra capilla con o sin esa persona seguimos de pie gracias a Dios y que ya no nos moleste y que Dios la proteja y a nosotros que no nos olvide claro nuestro padre Dios…
¡Gracias a Dios por este grupo!
Gracias a Dios por el Dr. Contreras.
Todos los mensajes de Renuevo de Plenitud, sin excepción nos dan una enseñanza de amor, nos enseña valores que a veces olvidamos o fingimos que no existen, y miren quienes nos dan una gran muestra de valores: personas que “necesitan” de los demás.
Que Dios siempre nos bendiga.
Estoy muy agradecido del señor por que el es fiel y maravilloso ,y su misericordia`para com sus hijos ,agradecido por mi familia toda en general ,por que el señor nunca hiso execciones de persona ,pero me dio un hijo para darle todo lo que el me da y una famila por su sangre presiosa lo amo gracias mi dios bueno