Cuando la conocí tenía 16 años, fuimos presentados en una fiesta, por un tío que decia ser mi amigo.
Fue amor a primera vista, Ella me enloquecia.
Nuestro amor llegó a un punto, que ya no conseguía vivir sin ella.Pero era un amor prohibido.

Mis padres no la aceptaron. Fui expulsado del colegio y empezamos a encontrarnos a escondidas.
Pero ahí no aguanté mas, me volvi loco, yo la quería, pero no la tenía.
Yo no podia permitir que me apartaran de ella.
Yo la amaba: destrocé el coche, rompí todo dentro de casa y casi maté a mi hermana. Estaba loco, la necesitaba.

Hoy tengo 39 años; estoy internado en un hospital, soy inútil y voy a morir abandonado por mis padres, amigos y por ella.
¿Su nombre?
Cocaína.
A ella le debo mi amor, mi vida, mi destrucción y mi muerte.

Freddie Mercury
(1946-1991)
Lo escribió antes de morir de SIDA.

En gran cantidad de ocasiones los seres humanos tendemos a volver nuestra mirada a Dios y reconocer nuestros errores ya cuando es demasiado tarde. Aprovechemos las experiencias de otros cuyo ejemplo nos motiva a evitar caer.

Nunca es demasiado tarde! recuerda que por mas dificil que sea la situación, por mas profundo que hayas caido y aunque ya no haya manera de cambiar las consecuencias físicas de tus errores, si estas arrepentido de corazón y has tomado la decisión de no reincidir, recuerda las palabras del libro de la sabiduría (Proverbios 28:13) “Mas el que confiesa su pecado y se aparta, alcanzará misericordia” siempre hay un Padre celestial que te ofrece que eches “toda tu ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de ti” (1 Pedro 5:7).

2 Corintios 5:17
De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es: las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
1 Crónicas 16:34
Celebrad á Dios, porque es bueno; Porque su misericordia es eterna.

Agradecimiento especial por su aporte para la Familia Palacios (JeruBelen) .-USA