Se Necesita:
Un ejército pacifico y unido que crea en el valor de las pequeñas cosas. Gente que construya la historia y no se deje arrastrar por los acontecimientos.
Más corazones desarmados, en un mundo lleno de guerras. Almas magnánimas en una sociedad interesada.
Espíritus fuertes para un siglo de mediocridades. Más trabajadores y menos personas que critiquen.
Más ciudadanos que digan: “Voy a tratar de hacer algo”, y menos que se contenten con: “Es imposible”.
Un número mayor de audaces que se lancen al fondo del problema para resolverlo y un número menor de fatalistas acomodados en la omisión.
Más amigos que se arremanguen con nosotros, y menos demoledores que apunten solo defectos.
Más gente que almacene esperanza, y menos frustrados que acarreen toneladas de desánimos.
Más personalidades que perseveren y menos colegas que comienzan y nunca acaban. Más rostros sonrientes y menos frentes nubladas.
Más compañeros bien asentados en la realidad y menos soñadores pendientes de las ilusiones pasajeras.
Necesitamos con urgencia, sin falta: un mundo en manos bienhechoras encendiendo una luz, para iluminar el pesimismo de la multitud. Un fósforo en la mano… pequeño, ¡pero tan importante! Pequeño, insignificante, ¡pero como ilumina disipando la oscuridad!
Autor Desconocido
La lista de “se necesita” resulta realmente interesante. El problema mayor consiste en que somos muchos los que hacemos listas similares a esta, buscando que Dios y los demás contribuyan a llenar el vacío que exponemos, cuando en realidad debiésemos abrirnos a las posibilidades de ser nosotros la respuesta al “se necesita” de tantos otros que nos rodean.
Dios en nosotros es esperanza de cambio y bendición—no sólo para nosotros mismos—sino para los demás.
Atrevámonos a ser instrumentos de bendición en las manos del Señor.
Adelante y que Dios les continúe bendiciendo.
Raúl Irigóyen
El Pensamiento Del Capellán
Muchas veces no sé lo que quiero, muchas otras no deseo nada, tantas más deseo todo. A veces me canso de todo, y a veces me hastío de nada. Es entonces cuando acudo a Dios, lo busco y a veces (muchas veces) lo he encontrado, pero también más de esa muchas he naufragado en su búsqueda, teniéndolo tan cerca y tal vez no viéndolo como El quiere sino como yo lo necesito. Será esa mi equivocación? Será qué no sé buscarlo? O será qué no sé retenerlo cuando lo he encontrado? Sé de El y El sabe de mi. Sé que está ahí para fortalecerme, pero también sé que no está para alcahuetearme. Soy en perdido con brújula, soy un extraviado con mapa, estoy a la deriva en un mar de nada, y en una soledad de todo. Pero amo a Dios y El me ama también (lo sé, lo intuyo) Solamente tu mi amado Dios entiendes qué quiero decirte. Ayúdame, fortalecerme, ampárame y abrázame. Mejor aabrazamonos tu y yo amado Dios infinito y dame de TU infinita energía. La necesito… esa es mi vida… TU eres mi vida. Tu me entiendes amado Dios, tu me entiendes!
Asi es!! amen.
Es hermoso que cada día el señor nos hable por este medio… Gracias
ME GUSTAN. SOLO UN COMENTARIO, CITAS BÍBLICAS EN LECTURAS. GRACIAS
DIOS TE AMA. AMÉN
Amen , excelente reflexión , es verdad estamos viviendo una época de individualismo , que solo nos preocupanos de mi y de nuestra familia que hoy en día no conocemos bien a nuestros vecinos ya no es como la época de nuestros abuelitos que compartían penas y alegrías con todos los que vivían en su entorno