Unos obreros estaban picando piedras frente a un enorme edificio en construcción. Se acercó un visitante a uno de los obreros y le preguntó:
-¿Qué están haciendo ustedes aquí?
El obrero lo miró con dureza y le respondió:
-¿Acaso usted está ciego para no ver lo que hacemos? Aquí, picando piedras como esclavos por un sueldo miserable y sin el menor reconocimiento. Vea usted ese mismo cartel. Allá ponen los nombres de Ingenieros, Arquitectos, pero no ponen los nuestros que somos los que trabajamos duro y dejamos en la obra el pellejo.
El visitante se acercó entonces a otro obrero y le preguntó lo mismo.
-Aquí, como usted bien puede ver, picando piedras para levantar este enorme edificio. El trabajo es duro y está mal pagado, pero los tiempos son difíciles, no hay mucho trabajo y algo hay que hacer para llevar la comida a los hijos.
Se acercó el visitante a un tercer obrero y una vez más le preguntó lo que estaba haciendo. El hombre le contestó con gran entusiasmo:
-Estamos levantando un Hospital, el más hermoso del mundo. Las generaciones futuras lo admirarán impresionados y escucharán el entrar y salir constante de las ambulancias, anunciando el auxilio de Dios para los hombres. Yo no lo veré terminado, pero quiero ser parte de esta extraordinaria aventura.
El mismo trabajo, el mismo sueldo, la misma falta de reconocimiento; una misma realidad. Tres maneras distintas de vivirla: como esclavitud; como resignación; como pasión, aventura y desafío.
Depende de tí que haces cada mañana, cuando te levantas.
Tenemos la elección; Podemos pasar el día quejándonos, repasando la dificultad que tenemos con la cosas que no funcionan, o salir de la cama y estar agradecido por las que sí funcionan”.
Vivamos con ilusión, convirtamos el trabajo en una bendición, sintámonos parte de la extraordinaria obra planteada por el Ingeniero Supremo..!
Colosenses 3:23
Y todo lo que hagáis, hacedlo de ánimo, como al Señor, y no á los hombres.
Gálatas 6:7 “No os engañeis: Dios no puede ser burlado: que todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.”
Agradecimiento especial por su aporte para Alejandra Chapa -.México.-

Que buena reflexión debemos ser muy agradecido con el Señor y solo confiar en Él y en todas su promesas y amen
El trabajo dignifica al hombre y lo enorgullece, lamentablemente muy pocos empleados se sienten a gusto en sus empleos lo hacen por obligación y por cubrir sus necesidades.
Amen gracias.
DIOS EN SU INFINITA MISERICORDIA NOS DA UN TRABAJO POR EL CUAL DEBEMOS AGRADECERLE TODOS LOS DÍAS, PUES, POR MEDIO DE LA REMUNERACIÓJ DE DICHO TRABAJO PODEMOS PROVEER PARA LAS NECESIDADES DE NUESTRA FAMILIA. SIN EMBARGO, MUCHAS VECES LEJOS DE AGRADECER A DIOS POR EL TRABAJO CON EL QUE NOS HA BENDECIDO NOS LA PASAMOS QUEJANDONOS DEL TRABAJO QUE TENEMOS Y DE LO MAL PAGADO DE ACUERDO A NUESTRO CRITERIO.
NO OLVIDEMOS QUE DIOS CONOCE CUALES SON NUESTRAS NECESIDADES Y EL NOS PROVEERA LO NECESARIO PARA SATISFACER CADA UNA DE ELLAS, RECORDEMOS QUE SÓLO DEBEMOS BUSCAR SU REINO Y SU JUSTICIA Y TODAS LAS COSAS NOS SERÁN DADAS POR PARTE DE DIOS.
Hermosa reflexión que viene como anillo al dedo , porque las personas se quejan por lo que hacen en vez de agradarle a Dios haciendo su trabajo.
Debemos hacer las cosas como para el Señor sin mirar quién es nuestro jefe y para ser bendecidos debemos trabajar con buena actitud y con mucho agradecimiento. Tengamos muy buenas reséñate que lo que sembramos pues eso también secaremos. Muy buena enseñanza.
Gracias y muchas bendiciones