Los 3 errores muy comunes que cometen los padres a la hora de hablar con sus hijos e hijas.
Resulta extraño que muchos adultos colapsen ante las preguntas inocentes de nuestros niños y niñas o ante los usuales cuestionamientos de un/a adolescente.
Muchas personas me han escrito pidiendo algún consejo para poder hablar de cierto tema con sus hijos e hijas o preguntándome qué hacer cuando su comportamiento es inadecuado.
Lo que a muchos adultos les da miedo es no encontrar la respuesta adecuada a una conducta o a un cuestionamiento. Hace poco escuchaba el relato de una mamá que me decía que ella había preferido no hablarle de sexo a su hija de nueve años porque le daba miedo que con esto ella fuera a “abrirle los ojos” y perdiera su inocencia…. Lo que mamá no sabía era que la niña había estado conversando sobre el tema con unas compañeras y un compañero que se habían encargado de despertarle curiosidad de sobra al contarle los famosos chistes de Pepito.
Cuando la chica le preguntaba ¿qué era eso de hacer el amor? O ¿por qué las mujeres tienen la menstruación? la mamá respondía siempre con una excusa, alegando a su edad y a su falta de madurez para entender ciertas cosas.
En otro caso, tuve la oportunidad de intervenir en la discusión entre un adolescente de quince años y su mamá. El adolescente, indignado le cuestionaba un castigo que a mi parecer era realmente absurdo, porque no me imagino a un adolescente que por un mes no pueda ver tele, ni usar su video juego, ni su computadora, ni salir a la calle, ni hablar por teléfono!!!!!!!!
Pregunta importante: ¿qué iba a hacer con todo su tiempo libre? Porque, he de señalar que académicamente el joven era excelente; simplemente había llevado una nota del orientador del colegio, pues en una situación de clase, según el profesional, el chico “había reaccionado violentamente” cuando se defendió de la burla de unos compañeros que le pateaban su bulto.
El conflicto se subió de tono cuando el adolescente le preguntó a su mamá porque le castigaba de esa manera; ella llevada por una tormenta emocional, en donde ganaba el enojo, simplemente le contestó la frase célebre de muchos padres y madres : ¡Porque yo dije y punto!
Comprendamos que los adolescentes, las niñas y los niños de hoy, se han criado en mundo lleno de estímulos, son más críticos, analíticos de lo que usted y yo éramos en nuestras épocas.
Probablemente, si usted y yo en nuestra infancia hubiésemos contestado de esta manera la historia habría sido otra… estaríamos contando sobre la forma en la que probablemente nos abofetearon o nos castigaron… no solo por la falta cometida, sino también por haber refutado.
Este tipo de respuesta es arbitraria, poco profunda y autoritaria. Los niños y adolescentes de hoy no se bastan con este tipo de argumentos por lo que a la larga pueden incrementar el conflicto. Si usted tiene fundamentos para aplicar una medida, no será necesario recurrir a tal frase.
De estos ejemplos quiero agarrarme para tocar 3 errores muy comunes que cometen los padres a la hora de hablar con sus hijos e hijas:
Punto # 1 Evite dar por sentado algo sin haber dialogado profundamente el tema
En ocasiones, ésta posición puede dificultar las relaciones entre padres e hijos. Cuando usted bloquea la comunicación con una postura rígida, está de alguna manera actuando en su contra, porque probablemente en una próxima situación su hijo/a no va a recurrir a usted a pedir su consentimiento. Hay ocasiones en que los adultos saltamos a conclusiones de manera ilógica, obviamos los puntos de vista que para ellos y ellas son válidas y nos amparamos a la luz de la “sabiduría” y la “experiencia”.
En situaciones de conflicto; hable, dialogue, nada pierde en escuchar el punto de vista que tiene su hijo/a, esto no implica que usted tenga que ceder a algo con lo que no esta de acuerdo; sino que va a tener un punto de vista más amplio. Muchas veces los padres y madres dictan una sentencia de forma precipitada, sin haber dado el beneficio del descargo, por eso cuando se percatan que dieron un paso en falso, caen en enormes sentimientos de culpa que al fin de cuentas no va a ayudar de mucho. Busque establecer acuerdos basados en la comunicación, permítase jugar con las ideas y crear nuevas opciones.
No entre en pánico, trate de comprender lo que se le plantea.
Punto # 2 ¿Esta seguro/a que los límites y las normas eran claras?
A veces sucede que los conflictos surgen porque desde el principio las reglas no fueron claras. Hay casos inclusive en donde después de haber otorgado algún privilegio o algún permiso, sin dar ninguna razón se cancelan. O por ejemplo, se otorgó un permiso sin establecer cuales eran las limitaciones o las condiciones para este beneficio.
Trate de ser muy claro con los permisos que otorgue. Si usted acostumbra ceder y cambiar las reglas; después no se asombre ni pierda los estribos cuando sus hijos/as pulsen por que se vuelva a cambiar la regla. Hay reglas que se pueden revisar; pero aún así haga la aclaración de porqué el cambio. Por ejemplo, hace unos días entrevisté a unos papás que habían cancelado la fiesta de cumpleaños de su hijo de siete años porque había participado en una pelea con unos compañeros.
Si bien es cierto, merecía una medida correctiva; quizás suspender una fiesta que estaba ya adelantada en preparativos y que generaba tanta emoción en el niño iba a ser una medida extrema. Después de conversar largamente con los padres, lograron comprender que si las fiestas iban a ser utilizadas como castigo; probablemente este chico iba a recordar con amargura sus cumpleaños pues probablemente no sería la primera ni la última. Este niño en particular había sido diagnosticado con síndrome de déficit atencional con hiperactividad, por lo que las conductas impulsivas eran la meta a trabajar.
Estos padres hablaron con el chico y rectificaron su medida, le explicaron con detalles porque iban a cambiar la medida y también que no debía esperar que esto fuera a repetirse cada vez que tuviera una medida correctiva. Lo enfocaron desde una perspectiva positiva pues dentro de su conversación reconocieron cuan importante era para él el evento y como ellos eran capaces de brindar una nueva oportunidad para que el no perdiera este privilegio.
Estos padres lograron movilizar en el niño tal agradecimiento que su conducta mejoró notablemente.
Punto # 3: Los que siempre postergan pero no resuelven
Tal y como lo ilustré en el primer ejemplo, hay padres y madres que ante el temor de tener que contestar una pregunta, dar una explicación o profundizar sobre una medida correctiva, tienden a escabullirse con el “después hablamos” o “después le explico”.
Sus hijos e hijas tienen que saber que no tienen padres con especialidades o doctorados en maternidad y paternidad. Principalmente, aquellos que entran por primera vez en la aventura de criar a un adolescente….. Que no le dé miedo decirle un “no se”, “déjame preguntar”.
Lo importante aquí es que el tiempo de espera de ellos y ellas no vaya a ser muy prolongado o que nunca llegue la ansiada respuesta. Por supuesto que hay ocasiones en que al abrir un tema de conversación con ellos, resulte como que abrimos una caja de pandora, que lejos de satisfacer su incógnita se genere más material de conversación, de preguntas.
Déjeme decirle que esto es lo ideal. Trate que sea usted la primera persona a la que ellos y ellas le pregunten, le cuestionen.
Pídale a Dios sabiduría a la hora de hablar con sus hijos e hijas. Evite actuar de forma impulsiva y sobre todo no trate de manejar situaciones difíciles cuando el enojo se apodere de usted.
Busque espacios de diálogo, ojalá en lugares neutrales, donde pueda haber discreción y privacidad si fuese necesario. Puede tomar un espacio semanal para que acudan a una cafetería o a una heladería y abrir un espacio de comunicación. Este espacio puede ser muy efectivo si usted lo practica con regularidad y le otorga toda la formalidad que merece.
Cuidado con esto: una adolescente le reclamaba a su mamá que las salidas para hablar, ella las aprovechaba para ir a hacer compras y para contestar todas las llamadas que entraban a su celular!
Recuerde que es un espacio para hablar!
Hasta entonces!
Licda. Tatiana Carrillo Gamboa
Psicóloga y Psicopedagoga.
PAPAS Y MAMAS DE TODAS PARTES DEL MUNDO! LOS QUE LEEIS Y LOS QUE ESCUCHAIS: ……. TENED EN CUENTA LO SIGUIENTE: …..; DIALOGAD SIEMPRE CON VUESTROS HIJOS AS Y NUNCA LOS DEJEIS EN ” LA DUDA ” PORQUE ELLOS TRATARAN DE BUSCAR LA RESPUESTA POR ELLOS SOLOS EN OTROS CIRCULOS QUE PUEDEN NO SER PROPICIOS PARA ELLOS.! PRECAUCION PADRES DE FAMILIA! …..SIEMPRE HABLADLES REPOSADAMENTE, SIN ENGANARLES, NI EQUIVOCARLES!, SED SIEMPRE SINCEROS CON ELLOS AS Y HACEDLES VER LOS ERRORES Y PELIGROS QUE LES PUEDE OFRECER LA VIDA DE AMISTADES, CON VICIOS, Y TENTACIONES NADA RECOMENDADAS! …. SED INTELIGENTES Y SIEMPRE DIALOGUEN CON ELLOS ENCONTRANDO LOS MOMENTOS MAS OPORTUNOS PARA HACERLO, CON TRANQUILIDAD EN UN AMBIENTE DE PAZ Y CONCORDIA!!!…. ESTE ES NUESTRO MEJOR CONSEJO PARA UNA VERDADERA EDUCACION Y FORMACION!….. VIVID TODOS EN DIOS Y CON DIOS, PARA QUE VUESTROS HIJOS AS PUEDAN HACERLO TAMBIEN!…… QUE DIOS OS BENDIGA HERMANOS AS DE RENUEVO!
Hola, gracias por los consejos y también por ayudarme a ser una mama más abierta al dialogo y a buscar en el Señor la sabiduria y la corrección en su amor…Quisiera que me ayudaran en este tema: mi hija de 12 años, desde los 4 años hace deporte, y ha surgido un viaje para competir en otra ciudad, bastante alejada. Con mi esposo, pensamos que no es correcto dejarla ir sola, (aunque mi hija insiste mucho en ello),por los peligros que puedan llegar a surgir, pero también queremos fomentar su futura independencia, por esto mismo, vemos una disfunción en lo que pensamos y lo que mi hija necesita y más en cómo está el mundo en que vivimos. Está bien dejarla viajar sola con su grupo? o tengo que esperar a que tenga más edad? …podrían darme su opinión,muchas gracias…. que la paz de Dios reine en vuestros ocrazones…
Muchas gracias por este mensaje, tengo dos niños uno de 9 años y otro de 5 años, soy separada hace dos años, gracias a Dios hasta el momento los niños han asumido la separación de buena manera. Pero si hay momentos que siento temor de equivocarme cuando tengo que castigarlos. Los mensajes que me llegan a diario a mi correo me han servido mucho, muchas gracias Que Dios los bendiga
hola dario,soy hermana en cristo,pase algo similar tiempo atras ,por lo q te digo,no te pongas mal,ellas demuestran q te aman a ti,y quisieran la primer mama (en su pensamiento)pero tienes algo en tus manos,arma poderosa para contrarestar todo lo q el enemigo haga en la mente de tus niñas,ora,el señor conceda peticiones de tu corazon,espero tu visita en mi correo zinia_valiente@hotmail.com
siempre que los niños o adolecentes quieran imponer algo,nosotros debemos consultar primero con el señor,luego todo el amor de dios este en nosotros para que dios capacite con sabiduria como hablar con ellos,guiarlos y decirles la verdad que este mundo tiene muchas cosas q lo van a facinar pero no,nos sirve x q nos va a llevar a la perdicion,hermanos oremos mas x nuestros hijos q el señor nos escuha