Una historia que habla al corazón
En algún momento de la vida, todos nos hemos sentido solos, abandonados, confundidos. Quizás tú también has mirado hacia atrás y has visto una sola huella en tu caminar… preguntándote: “¿Dónde estás, Dios?”.
Esta reflexión nace de una imagen conmovedora: la de una persona que, al soñar su vida como una caminata por la arena junto al Señor, nota que en los momentos más difíciles solo hay un par de huellas. Confundido, pregunta por qué Dios lo dejó justo cuando más lo necesitaba. Y la respuesta es reveladora: “Cuando viste solo una huella, fue porque te cargué en mis brazos”.
Este mensaje no solo emociona: te recuerda que nunca has estado ni estarás solo.
Cuando el dolor nubla la fe
¿Por qué sentimos que Dios se aleja?
En tiempos de dolor, pérdida o incertidumbre, es natural que tu fe se tambalee.
Te preguntas por qué las cosas malas suceden, por qué no sientes consuelo inmediato, o por qué tus oraciones parecen no tener respuesta. La sensación de abandono es profunda… pero es una ilusión.
Dios no solo camina a tu lado. Cuando tus fuerzas se acaban, Él te levanta.
“Aunque mi padre y mi madre me abandonen, el Señor me recibirá.”
— Salmo 27:10
Dios nunca deja de caminar contigo
Incluso en tu silencio, Él habla
El amor de Dios no depende de tus emociones. Aunque no lo veas, aunque no lo sientas, Él está obrando a tu favor. Muchas veces su presencia se manifiesta de forma silenciosa: a través de una palabra de aliento, una señal inesperada, o la paz que aparece en medio del caos.
Testimonio: Cuando me sentí solo, Dios me levantó
Recuerdo una etapa en mi vida en la que todo parecía derrumbarse: perdí a un ser querido, mi situación financiera era crítica, y mi salud se deterioraba. No entendía por qué. Lloré. Grité. Me sentí abandonado por Dios.
Hasta que un día, en la quietud de la noche, abrí mi Biblia y leí: “No te dejaré ni te desampararé” (Josué 1:5).
Fue como si Dios me hablara directo al alma. Desde entonces, entendí: no estaba solo. Nunca lo estuve.
Tres señales de que Dios te está cargando
- Sientes paz en medio de la tormenta
No es normal estar tranquilo cuando todo va mal… a menos que Dios esté contigo. - Personas que llegan “justo a tiempo”
Una llamada, un mensaje, una ayuda inesperada: instrumentos del amor de Dios. - Recuerdos que te fortalecen
Momentos pasados donde creíste que no podrías… y sobreviviste.
Cómo confiar en Dios cuando no ves sus huellas
1. Recuerda lo que ya hizo por ti
Haz memoria de las veces que te ha rescatado. ¡No es la primera vez que te carga!
2. Aférrate a sus promesas
Dios nunca miente. Su palabra es firme, incluso cuando tus emociones tambalean.
3. Habla con Él, aunque sea con lágrimas
Tu oración no necesita ser perfecta. Solo necesita ser sincera.
Listas para fortalecer tu fe
Versículos para cuando te sientas solo:
- Isaías 41:10 – “No temas, porque yo estoy contigo…”
- Mateo 28:20 – “Yo estaré con ustedes todos los días…”
- Salmo 34:18 – “Cercano está el Señor a los quebrantados de corazón…”
Acciones prácticas para reenfocar tu fe:
- Escucha música cristiana que te eleve
- Escribe un diario espiritual
- Busca una comunidad de apoyo (grupo de fe, iglesia local)
Reflexiona: ¿Dónde están tus huellas?
El camino de la vida no siempre es fácil. Pero hay una verdad que debe acompañarte siempre: Dios no te abandona. Él te carga.
“En los momentos más oscuros, tu luz me sostuvo. En mi debilidad, fuiste mi fuerza.”
Piensa en tu vida. ¿Recuerdas un momento en el que sentiste que no podías más… y sin embargo aquí estás?
Tu fe puede ser el milagro de alguien más
No guardes solo para ti esta verdad. Alguien cerca de ti necesita recordar que no está solo.
Comparte este mensaje, ora por esa persona y sé el reflejo de las huellas de Dios en su vida.
Y tú… ¿en qué momento viste una sola huella?
Te invito a dejar en los comentarios una experiencia donde sentiste que Dios te sostuvo cuando más lo necesitabas. Tu historia puede darle esperanza a otros.
¿Cuándo viste una sola huella… y te diste cuenta de que Dios te llevaba en brazos?

Lindo mensaje!!
Ana G Nieves González
El amor de Dios es enorme infinito maravilloso. Realmente en determinados momentos de la vida si podríamos pensar q no esta con nosotros pero nos equivocamos su amor nos acompaña siempre y así debemos entenderlo no importa lo que suceda. A todos los colaboradores de Renuevo de Plenitud sus reflexiones me llenan de vida
Gracias amigos de Renuevo de Plenitud, por tan hernosos mensajes, se Jesús está conmigo en todas las horas de mi vida y no me abandona, en mis momentos difíciles, siempre tengo presente el versículo de Mt, 11,28, Yo os haré descansar.. Que el Señor los bendiga y nos permita seguir disfrutando de sus hermosos mensaje que nos lleva a la reflexión.
Muchas gracias por estas reflexiones tan hermosas. De verdad que ellas son un verdadero alimento para el alma. Que el Señor los siga bendiciendo y que me permita seguir disfrutando de estos mensajes tan maravillosos.
Pastor Contreras muchìsimas gracias por tan lindos mensajes.
QUE MI SEÑOR JESUS ME LO CONTINUE BENDICIENDO CADA VEZ MAS.
Estas reflexiones son de gran bendiciòn para mi vida.
Rosita de Velasco