El amor es generoso e incondicional!
La generosidad tiene que ver con la actitud de “dar”, que de acuerdo a la enseñanza bíblica, es mejor que recibir.
El mejor modelo de generosidad es el mismo Señor Jesucristo que dio hasta su vida por la salvación de una humanidad que no lo merecía, sin embargo él se entregó voluntaria e incondicionalmente.
El pacto del matrimonio fue diseñado para que cumpliera el objetivo de la unión de un hombre y una mujer para amarse, apoyarse, compartir y disfrutar de la vida mutuamente. Para alcanzar este objetivo es fundamental el ingrediente de la generosidad. Sin generosidad es prácticamente imposible lograr el nivel de estabilidad emocional que un matrimonio necesita para mantenerse saludable.
La generosidad implica la decisión de servir al cónyuge con excelencia, darle la atención que necesita, suplir sus necesidades, apoyarle, animarle, levantarle el ánimo, levantar su autoestima, etc.
Darse generosamente al otro, significa darse incondicionalmente y con alegría, no por obligación, sino por convicción de que es un principio bíblico ensenado por Jesucristo y que va a producir un fruto abundante en nuestras vidas de amor, paz, gozo, fe, bondad, benignidad y dominio propio.
Si nuestra misión en el Matrimonio es amar al cónyuge y encargarnos de su bienestar, hagámoslo con generosidad, hagámoslo con excelencia.
La formidable promesa de Dios que nos diseñó y nos creó, es que si sembramos generosamente, generosamente también cosecharemos. Es una ley universal! Todo lo que siembres, eso recogerás. Tenemos que tener fe y confianza de que si Dios nos da esa promesa, es porque así es.
La cosecha la obtendremos tarde o temprano, pero no desmayemos nunca de hacer la voluntad de Dios.
La motivación correcta para darnos generosamente en el matrimonio, no es para obtener nada a cambio, ni porque el cónyuge lo merezca o no; sino para honrar la palabra de Dios. Lo maravilloso es que cuando lo hacemos con esta motivación, entonces obtenemos la recompensa que Dios nos promete.
Si tu matrimonio no está muy bien, empieza a practicar la generosidad a la manera de Dios y confía en sus promesas. Si tu matrimonio está bien, fortalécelo con generosidad incondicional.
Tu matrimonio y tu familia es el tesoro más valioso que Dios te ha dado. CUÍDALO!
www.libresparaamar.or
Luis y Hannia Fernandez
matrimonios@happy4ever.org
Me alegro por todos los que están casados, ya que este es un mandamiento instituido por Dios para la pareja, el matrimonio dejara el hombre a su Padre y Madre y los dos serán una sola carne.
Que Dios los bendiga La Hermana Argelis, La Chorrera, Panamá.
DIOS MIO GRACIAS EN TODO MOMENTO POR ESTAR PRESENTE EN NUESTRAS VIDAS TODOS LOS DIAS, GRACIAS POR MI MATRIMONIO MI FAMILIA ..BENDICENOS SIEMPRE…
mil gracias por tan hermosas palabras, estamos seguros mi esposa y yo, en la elocuencia del mensaje que va a servir para fortalecer las familias, porque en el fondo está ese personaje divino CRISTO JESUS que solo desea lo mejor para todos.
hola… necesito ayuda en mi matrimonio ,llevo 28 años casada ,pero siempre he sido yo la que lucha,la que da el brazo a torcer,la que cede,la que calla,la que abraza…la que da afecto incluso la que mas aporta tanto material como moral y la verdad siento que ya me canse… siento que me estoy desenamorando de mi esposo…He soportado todo este tiempo con ayuda de mi papito Dios,en obediencia a EL…no se que hacer? desde que nos casamos he intentado el dialogo sin ninguna respuesta ,la oracion…El no es un mal hombre si no que se le olvida que antes de ser esposa y madre sigo siendo mujer,y con su actitud altiva, fria,y a veces altanera, lo que esta consiguiendo es que yo me pregunte cada dia que hago al lado de un hombre que no me ama lo suficiente como para cambiar y ser mas generoso conmigo como lo demanda nuestro Padre Celestial…
Apreciables hermanos, agradezco este mensaje al Señor, porque sé que es parte de la vida de la familia que está en Cristo y parte de los frutos del Espiritu Santo nos proporciona ésta actitud de dar generosamente.
¿Qué hacer cuando das y eres rechazado, o es rechazado con argumentos que no vienen al caso. Cuando algún día creíste que pidió algo y lo complaciste con todo el alma, pero que luego te das cuenta que lo ha regalado o lo ha extraviado sin problema alguno? ¡Que hacer cuando nada es correcto o adecuado y solo ella tiene la razón y la última palabra?
Gracias por su respuesta, comprensión y oración.