¿Cómo puede el ser humano despojarse de tantas fobias y obsesiones?
Entregándole su vida a Cristo. La persona que no tiene a Cristo en el corazón será para siempre víctima de pasiones desorbitadas.
Es que sólo Jesucristo —Señor, Salvador y Maestro perfecto— puede darnos esa estabilidad, ese equilibrio y esa moderación ideal.
Cuando Él entra a nuestro corazón, transforma nuestro modo de pensar, y todos nuestros móviles cambian. Sometámonos a su divina voluntad. Él quiere ser nuestro amigo.
Él estará a su lado para siempre… Pruébalo!
Me encantan las exposiciones cristianas que oigo en Los videos que ustedes publican. Me gustaria que tomaran en consideration mi nombre y me permitan continuar disfrutando de Los mismos, en mi cuenta facebook o holmail
me gustaría ganarme ese viaje para compartir con mi familia ese viaje.
Bendiciones
yo siento que el mal de todos los hombres es el amor al dinero o en otras palabras los afanes del mundo nosdamos cuentas que emos sido engañados por ese dios falso y cuando lo sabemos y nos damos cuentas bolbemos aestar muy cansados agotados deseperansados y somos como aquel hijo prodigo que buelbe asu casa a pedirle perdon a su padre para que el lo aga descansar bendito su nombre
Estas reflections me edifican me ayudan a seguir adelante aprendiendo cada dia mas la palabra del señor
Excelente reflexión en la cual el hermano Pablo nos enseña a la luz de la verdad, que nuestra vida guiada por si mismos,es decir sin la ayuda de Dios, carece de sentido y nos arrastra hacer cosas motivados por las pasiones y deseos desordenados,que al final nos causan sufrimiento y mucho dolor,no sólo a nosotros mismos sino también a nuestros seres queridos.Gracias por esta reflexión,porque nos hace meditar que todos los afanes de la vida,son vanos y no dan buen fruto;tenemos que rendir a Cristo nuestro corazón,entregar nuestra alma a Dios y recibir el perdón de nuestros pecados .Sólo unidos a Dios por la fe en Cristo Jesús podemos tener una vida nueva,tener sosiego en el alma y hacer cosas que agraden a Dios y dar buen fruto.Bendito sea Dios que nos habla a través de esta reflexión y abramos nuestra mente y corazón para escuchar la voz de Dios que dice:”Trabajad,no por la comida que perece,sino por la comida que a vida eterna permanece,la cual el Hijo del Hombre os dará;porque a éste señaló Dios el Padre”.