Hemos tratado de hacer que cambie y no lo hemos logrado. Que hacemos!
Hay muchos matrimonios que sufren porque reclaman que su cónyuge no ha cambiado, que sigue siendo igual. Que han tratado de cambiar y no han podido. La verdad es que cambiar la forma de ser es normalmente bastante difícil, porque nuestro comportamiento se fundamenta en la información que tenemos en nuestra memoria.
Prov. 23:7: cuál es el pensamiento en su corazón, tal es él. Mt 15:19: del corazón salen los malos pensamientos. La memoria de la mayoría de los seres humanos contiene mucha información negativa, producto de la herencia genética, experiencias de la vida, eventos traumáticos, heridas emocionales, etc.
Toda esta información archivada en la mente de las personas, unido al temperamento de cada persona, determina su comportamiento en la familia, en el trabajo, en la sociedad, etc. La gran mayoría de personas terminan imitando a sus padres y así generación tras generación, con pequeños cambios en su comportamiento.
Por esta razón los profesionales de la medicina mental siempre preguntan sobre los antecedentes familiares del individuo, porque ya sabemos que eso influencia grandemente el comportamiento de cada individuo. Entonces a la hora de reaccionar a cualquier estimulo emocional, la mente del individuo hecha mano inmediatamente de la información que tiene en su memoria. Por ejemplo si de niño(a) alguien le habló muy fuerte y luego le castigo muy duramente, entonces esa persona cuando alguien le levanta un poquito la voz, su primera reacción es ponerse a la defensiva; y según el temperamento que tenga reacciona violentamente o reacciona depresivamente.
Todas las reacciones de los seres humanos obedecen primeramente a la información impresa en su mente. Si la persona ya ha tenido un encuentro con el Señor Jesucristo y ya es un hijo(a) de Dios, entonces puede empezar a cambiar poco a poco varias cosas en su vida. Algunas actitudes puede que sean más difíciles de cambiar en función de la carga emocional negativa que está por encima de esa actitud.
Toda persona debería someterse a un proceso de inteligencia emocional o sanidad interior para poder librarse de esas cargas negativas que afectan su comportamiento. Estos procesos pueden tomar algún tiempo de acuerdo a la magnitud de la carga emocional negativa. Pero si persiste en el tratamiento y permanece exponiéndose a la palabra de Dios, esa carga se va debilitando hasta que puede llegar el momento en que no afecta el comportamiento del individuo. Estos procesos deben ser guiados por personas capacitadas.
Cambiar entonces esos hábitos inapropiados o incorrectos requiere de un proceso de sanidad interior y de renovación de nuestra mente por medio de la lectura y estudio de la palabra de Dios. Requiere también de la decisión del individuo de dejar la actitud pasiva y trabajar por la renovación de su entendimiento, renunciar al egoísmo y la comodidad, para servir y atender a otros, comenzando con la esposa, el esposo y los hijos. Si has tratado de cambiar a tu cónyuge y lo(a) has juzgado por su comportamiento, debes pedirle perdón a Dios primero y luego a tu cónyuge por juzgarle, ya que no nos toca a nosotros hacerlo.
Los matrimonios debemos aceptarnos y soportarnos tal como somos. Luego debemos exponernos a la palabra y ayudarnos mutuamente en oración a vencer las debilidades del temperamento y a sanar las heridas, para que podamos ser libres para amar. Tú matrimonio y tu familia es el tesoro más valioso que Dios te ha dado. CUÍDALO!
Luis Y Hannia fernandez
www.libresparaamar.org
matrimonios@libresparaamar.org
Hola, bendiciones!
Gracias al Señor por permitirme leer este consejo en esta página.
Soy una mujer recien casa (hace 1 año) y mi esposo y yo acabamos de tener una bebé, pero hemos tenido serios problemas como este, donde “no podemos cambiar las costumbres”.
La verdad he visto que siempre es la mujer la que se queja de su pareja (casi todas las personas que han comentado aquí, son mujeres) y pues creo que somos nosotras las que más nos quejamos de ellos (los hombres).
En lo personal, creo que nosotras las mujeres somos muy dificiles de complacer o satisfacer,.. a veces de tanto y tanto que peleamos y sentimos miedo de que esto o aquello suceda, hasta que el hombre termina haciendo eso que temiamos.
Creo que la única respuesta para los problemas del hogar es el Señor, siempre cuando peleamos con nuestro conyugue es porque no tenemos presente a JESUS en nuestro corazón, por eso peleamos y alargamos más la distancia que ya teníamos con nuestra pareja.
Les animo a buscar del Señor, el es que tiene la última palabra. Recordemos que “EL ABORRECE EL DIVORCIO” así que a luchar por nuestro matrimonio, porque el esfuerzo será recompensado por nuestro SEÑOR, pues es mejor ser fiel a EL porque el nunca falla, y esto es lo que agrada a Dios.
Bendiciones,.!!!!
Gracias por estas hermosas reflexiones, nos ayudad a darnos cuenta qure no nos corresponde a nosotros cambiar a nuestro conyuge, solamente a Dios .
es muy buena la reflexion tambien he tratado de cambiar a mi esposo pero despues de esta reflexion pienso que primero tengo que cambiar yo para que dios opere un cambio en la vida de mi esposo
mi matrimonio se rompió hace 7 años ,por caracter fuerte y celos de el .Han pasado muchas cosas y sin embargo el dice que las personas no cambian nunca. Mi familia se destruyó hasta con los hijos.En algunos momentos me siento culpable y lo digo con gran tristeza, desearía volver a ese tiempo y ser más fuerte espiritualmente que como era . Cuando veo matrimonios que tienen grandes problemas …pero siguen unidos ,me digo a mí misma ! Que valientes ,como hacen! Ahora mi familia no es familia.
sobre.. el ultimo comentario..la verdad que solo Dios sabe todas las codas con antisipacion nuestra mente es muy pequeña para entende la mente de DIOS,solo devemos Orar y esperar en la Soberania de Dios.lloramos nos angustiamos y no pensamos en su inmenso Amor que el tiene; el tiene el contol de nuestra vida desde que nasimos asta que morimos.nuestro dever es solo Orar por nuetro conyuge y belar con todo ruego y esperanza, que si estamos confiando en el soberano el ara todo a nuetro favor y lo mejor….Por nada esteis afanosos,sino sean conosidas vuestras peticiones delante de Dios en toda Oracion y ruego,con accion de Gracias:..filipenses4:6