Nos convencemos a nosotros mismos de que la vida
será mejor después…

Después de terminar la carrera, después de conseguir
trabajo, después de casarnos, después de tener un hijo,
y entonces después de tener otro.

Luego nos sentimos frustrados porque nuestros hijos no
son lo suficientemente grandes, y pensamos que seremos
más felices cuando crezcan y dejen de ser niños.

Después nos desesperamos porque son adolescentes, difíciles
de tratar.

Descarga esta diapositiva aqui: La Felicidad