Leí una fábula acerca de un hombre que estaba mirando en una tienda cuando hizo el pavoroso descubrimiento de que Dios estaba detrás del mostrador. Así que el hombre se acercó, y preguntó: «¿Qué vendes?» Dios respondió: «¿Qué desea tu corazón?» El hombre dijo: «Quiero felicidad, paz mental y libertad del temor […] para mí y para todo el mundo». Dios sonrió y dijo: «Aquí no vendo frutos. Sólo semillas».
En Gálatas 6, Pablo enfatizó la importancia de sembrar semillas de comportamiento que honren a Dios, porque «todo lo que el hombre sembrare, eso también segará» (v.7). No podemos esperar experimentar el fruto de las bendiciones de Dios si no reconocemos la importancia de hacer nuestra parte.
Seguir el ejemplo de otros que han sembrado buena semilla puede ayudarnos. Samuel Shoemaker dijo que un buen ejemplo puede inspirarnos o hacernos decir: «Ah, sí, él (o ella) es así. Los cambios de humor, los nervios, la impaciencia o la preocupación no le suponen un problema como en mi caso; simplemente tiene mejor temperamento». Shoemaker continuó: «Puede que no se nos ocurra que tal vez esta persona haya tenido que luchar por su serenidad y que también podríamos triunfar si hiciéramos lo mismo».
¿Estás cansado de tu manera de ser? Pídele ayuda a Dios y comienza hoy a sembrar las semillas de nuevas acciones y respuestas. A su debido tiempo, el Espíritu dará el crecimiento.
Las semillas que sembramos hoy determinan el tipo de fruto que cosecharemos mañana.
Fuente: Nuestro Pan Diario 2009
Todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. —Gálatas 6:7
es impactante lo que DIOS, hace en nuestra vida de cada uno de nosotros, pero lo mas importante de todo esto como nos esta utilizando, somos jovènes inmortales que de cada palabra de DIOS, es un aliento de vida, nuestra crece cada mas con la ayuda de DIOS, somos atalaya y estamos a la obediencia para predicar la palabra de DIOS, sabemos que la vida esta llena de misterio pero tambien sabemos que podemos descubrirlos esos misterios, que esta en cada persona, pero eso es atraves del espiritu santo…
cada semilla que sembramos comienza a crecer nuestra vida espiritual, pero lo mas importante es saber que frutos vamos a cosechar cuando lleguemos a conocer la realidad y nuestros propositos…