Muchas veces en nuestras vidas nos sentimos como si fuéramos inservibles.
Pero no importa lo que haya ocurrido o lo que ocurrirá, nunca perderemos valor ante los ojos de Dios.
“Pisoteados, arrugados, o impecablemente planchados, somos apreciables para Él.”
El valor de nuestras vidas no se establece por lo que hacemos ni por a quién conocemos sino por los que SOMOS.
Estimados hermanos les agradesco por el mensaje porque meda mucha paz en mi corazon para ayudar alas personas con las que trabajo adiario en las calles y en la oficina con mis compañeros de trabajo y de la comunidad donde asisto con un corazon humilde y cincero para darles a entender que si para el mundo no valemos para nuestro padre celestial si mucho que DIOS los bendiga hoy y siempre donde quiera que se encuentre.
Gracias le doy a Dios y a las personas encargadas de esta pagina tan hermosa que cada dia nos ayuda ver la vida de una forma diferente y reflexionar acreca de lo vivido, gracias y que el Señor les continue bendiciendo.
amigo, es una gran prueba, porque eres una persona grande tambien en lo espiritual. DIOS ES PODEROSO Y TE SACARA DE ESA SITUACION.
Para Johhy: Descubre lo que Dios tiene para tí en medio de tanto conflicto. Si eres albañil ahora, recuerda que vales por lo que eres y no por lo que haces; descubre para qué Dios te tiene ahora allí, no por qué….seguramente tiene una razón muy especial y desea que solo tú la realices, fíjate en los que te rodean, tal vez te necesitan y por eso Dios te tiene allí; no importa si eres albañil o tienes otros títulos europeos; lo más valioso que eres es que eres un hijo de Dios si has creído en Jesucristo; y estar donde él quiere que estés, descubrir lo que quiere que hagas por otros (para servirle a él), es sin duda lo que te dará felicidad, paz y sentido de vida. No es culpa de la guerrilla (aunque parezca); descúbre lo que el Señor quiere enseñarte, y cómo quiere usarte; y vive, vive a plenitud, porque estás en los planes de Dios allí dónde estás. Miqueas 7:7. un abrazo.
Muy bueno¨, como todo lo que comparten. Edifican mi vida, me animan y me ayudan a animar a otros. Qué bueno que podemos compartir la palabra de Dios a través de este medio y otros más. Que el Señor continúe fortaleciéndoles en este ministerio. Nahum 1:7.