En la vida podemos ser golpeados con piedras tan grandes que nos dejen magulladuras y cicatrices tan grandes que con dificultad nos podremos levantar. Con cada golpe uno se cae, pero Dios siempre nos recoge.
Él nos quita esas piedras de encima y nos ayuda caminando junto a nosotros tomándonos de la mano.
La vida estará llena de pruebas y dificultades. Las llamo tormentas –tormentas que pueden consumir tanto de nuestra vida, tormentas que nos dejan aferrándonos con toda nuestra fuerza, esforzándonos por no soltar, luchando por sobrevivir.
Algunos de nosotros somos probados más duramente que los demás pero los fuertes que sobreviven estas tormentas son los que resultan victoriosos. Hay un sentimiento maravilloso que viene con la victoria de la fortaleza, perseverancia, determinación y en especial de toda fidelidad a Dios.
Con cada caida… con cada golpe… se aprende una lección.
Con cada lección viene el crecimiento. Con el crecimiento viene la madurez. Aprendemos a no lamentar la dificultad, sino a estar agradecido por ella. Debido a ella nos volvemos mejores.
No debemos voltearnos a mirar a nuestros errores pasados. Tenemos que tomar esos errores como parte de nuestra travesía hacia un mejor futuro. Necesitamos abrazar esas experiencias y permitirles moldearnos en lo mejor que podemos ser. Nadie sabe lo que la vida traerá.
Cada día vendrá con sus propios desafíos, pero necesitamos ser fuertes creyendo que Dios nos sacará adelante. Recordando su promesa de nuestra eternal paz y felicidad.
Yanira Crespo, copyright 2006
Los deportistas aman las dificultades porque ellas los hacen crecer. Los soldados saben sortear las hondonas. Los creyentes salimos en victoria de cada dificultad poque en él somos más que vencedores.
El Señor te entregará hoy en mi mano, y yo te venceré, y te cortaré la cabeza, y daré hoy los cuerpos de los filisteos a las aves del cielo y a las bestias de la tierra; y toda la tierra sabrá que hay Dios en Israel. 1 Samuel 17:46.
Y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo, dice El Señor, para librarte. Jeremías 1:19.
Dios les bendiga hermanos de Renuevo de Plenitud, gracias por sus reflexiones diarias… Con respecto a esta reflexión de abrazando las dificultades, de algo estoy segura, y es que Dios las permite para él glorificarse en nuestras debilidades, y siempre creo a esta promesa que aparece en Isaías 41:10 ” No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque soy tu Dios que te esfuezo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”…
Es gratificante saber que no estamos solos, es cierto cada dia se nos presentan retos que vencer pero como Cristo vencio nosotros en el somos mas que Vencedores. Gracias hermanos por recordarnos de esos desafìos que tenemos que enfrentar pero si Dios con nosotros ?Quièn contra nosotros?
BENDICIONES abundantes a este equipo que hace posible tan grandes verdades aplicables anuestras vidas GRACIAS.
buenos dias queridos hermanos que diosles vendiga a todos en nombre de jesus porque unico bueno es dios nadie es como el cuan grande es diosporque todo ve todo lo sabe todo lo oye todo puede porque para nada es dificil porque dios es infinito porque dios unipotente,unciente,y unipresente.solamente en dios todo poderoso hay salvacion eterna dice la palabra de dios en el libro de los hechos arepentios y convertios para que sean borados vuestros pecados y para que venga de la presencia de dios tienpo de refigerio amen y amen
Bendiciones es tan grande el amor del señor pero somos dejados en pedir a nuestro padre celestial pero si es reconfortante leer estas notas muy importantes motivantes para cada ser…ayuda bastante sigan apoyandonos con estas recetas
me encanto porque de igual manera suoe abrazar mis problemas dios no me dejo y estoy conociendolo aun mas