Muchos matrimonios viven una ansiedad relacionada con querer cambiar el comportamiento de su cónyuge!
Ansiedad: Estado de agitación, inquietud o zozobra del ánimo. Es un tipo de angustia que suele acompañar enfermedades, especialmente neurosis.
Hemos escuchado la queja de muchas personas que vienen a consejería con respecto a la forma de ser de su cónyuge, y cómo hacer para que él o ella cambie. Esta actitud produce mucha frustración porque el cónyuge “no cambia” como nosotros quisiéramos y entonces genera un tipo de ansiedad que limita las opciones y reduce la capacidad de disfrute de la vida.
La Biblia dice en Colosenses 3:13: Soportaos unos a otros y perdonaos unos a otros, si alguno tiene queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.
Lo que nos enseña el Manual de la Vida, es que no debemos pretender cambiar al cónyuge, sino aceptarlo tal y como es, y disponerse a soportar esa diferencia en su forma de ser que no nos agrada.
Cuando aceptamos la forma de ser de nuestro cónyuge, será mucho más probable que él o ella acepte también nuestra forma de ser. La verdad es que nadie es perfecto, por lo tanto si yo pretendo que mi cónyuge cambie algo en su forma de ser, me expongo a que él o ella también me exija cambios a mí, y esa parte no nos gusta mucho. Definitivamente lo que más nos conviene entonces es obedecer la instrucción del Señor y aceptarnos y soportarnos mutuamente con una actitud de gozo y no de pesar.
Estamos hablando de características en cuanto a la forma de ser, personalidad o temperamento. No estamos hablando de vicios, adicciones, violencia doméstica o actitudes destructivas. En ese caso hay que buscar ayuda inmediata, esencialmente espiritual y profesional para saber cómo enfrentar esas debilidades emocionales.
Por lo demás, debemos asumir una actitud tolerante y constructiva. Es totalmente normal que los cónyuges tengamos ideas diferentes, en cuanto a cómo manejar muchos asuntos familiares. A nosotros nos pasa con mi esposa, que frecuentemente tenemos ideas diferentes cuando queremos hacer algo por ejemplo para los hijos. Yo pienso en hacer una actividad de una forma y a mi esposa le parece que esa no es la forma correcta. Ambos tenemos que asumir una actitud de tolerancia, para seguir hablando del tema sin pretender imponernos ninguno al otro, sino seguir buscando opciones en las que los dos nos sintamos de acuerdo. Honestamente les decimos, que cuando hay una actitud saludable y humilde, siempre encontramos respuestas en las que los dos estamos de acuerdo.
Para eliminar entonces este tipo de ansiedad en el Matrimonio, la pareja debe asumir una actitud de tolerancia y respeto por las ideas y conceptos del cónyuge. Orar al Señor para que les de discernimiento a ambos y hablar sobre el tema con libertad y con paciencia, hasta que logren encontrar respuestas que ambos estén de acuerdo. La misión del hombre como cabeza de hogar es guiar a su esposa a buscar alternativas y soluciones con fundamento bíblico, no a imponer su criterio simplemente porque es el cabeza del hogar. Ser el líder del hogar no implica una autoridad absoluta de voluntad sobre su esposa, sino más bien un liderazgo que guía a su esposa a conclusiones y decisiones basadas fundamentalmente en la palabra de Dios.
Si has estado tratando de “cambiar” a tu cónyuge a tu manera, pídele perdón y toma la decisión de ser más tolerante y paciente con él o ella. No juzgues ni maltrates ni critiques a tu cónyuge porque piensa diferente a ti. Recuerda que dos cabezas piensan mejor que una sola. Une tus pensamientos con los de tu cónyuge y tendrán una visión mucho mayor para resolver cualquier problema en la vida.
Tu matrimonio y tu familia es el tesoro más valioso que Dios te ha dado. CUÍDALO!
Pr. Luis y Hannia Fernandez
Directores Generales
Together Happy and Forever Foundation
www.happy4ever.org
Definitivamente cuando uno de los conyuges quiere cambiar al otro surgen los incovenientes dentro de matrimonio. El único que cambia mentes y corazones es nuestro señor Jesucristo a traves de su Espìritu Santo. Para poder vivir una vida de pareja, en paz, bienestar, armonia debemos ser pacientes y tolerantes el uno con respecto al otro, hablar el mismo idioma y así nos vamos a entender, por tanto no debo pretender que mi conyuge sea como yo. Quitare entonces toda ansiedad en mi vida, oraremos juntos para que el señor haga su obra en nosotros y así obtendremos la victoria dentro del matrimonio. Es mi deseo que toda pareja tenga esa paz que necesitan dentro de su matrimonio.
ha sido un gusto y una bendicion recibir a diario las reflexiones y consejos de renuevo me sirven mucho pues soy una estudiante de instituto y me ayudan mucho a meditar gracias que dios les bendiga
me ecantaria recibir todo los dia reflexiones
gracias por el tema les cuento que llego en el momento preciso,…
muchas gracias y que
DIOS LOS BENDIGA
Es real en la vida de pareja se presenta siempre este tipo de problemas que solo con ser lo suficientemente firme en la relacion con Dios es como uno puede lograr superal las pruebas.