Cuando la vida parece oscura
A veces amanecemos y sentimos que el sol no ha salido. No me refiero al sol físico que ilumina el cielo, sino a esa luz interior que nos da fuerzas para seguir adelante. Hay días en los que el corazón se nubla, las lágrimas aparecen sin motivo aparente y todo parece perder sentido.
Pero incluso en esos momentos, aunque no lo creas, la luz sigue ahí. Solo está oculta detrás de las nubes de la tristeza, la frustración o la duda. Y cuando las nubes se disipen, volverás a verla con más intensidad que antes.
La fe no depende del clima
Puede que hoy te sientas sin energía, sin ganas de levantarte o sin motivación para enfrentar el día. Es normal. Todos tenemos momentos en los que el alma se siente cansada. Sin embargo, es precisamente en esos días cuando tu fe tiene la oportunidad de crecer.
“Aunque mi alma esté abatida, esperaré en Dios, porque aún he de alabarle” — Salmo 42:5
La fe no se fortalece en los días soleados, sino en medio de la oscuridad. Es allí donde aprendes a confiar sin ver, a creer sin sentir y a mantenerte firme aunque el viento sople en tu contra.
Lecciones en medio de la oscuridad
Cuando la vida parece detenerse, Dios sigue trabajando. Tal vez no lo notes ahora, pero cada dificultad está formando en ti una nueva versión, más fuerte, más sabia y más compasiva.
Aquí algunas verdades que puedes recordar cuando sientas que el sol no sale:
- Dios no se ha ido, aunque no lo sientas presente.
- Tu valor no depende de tus circunstancias, sino de quién eres en Él.
- Cada noche tiene un amanecer, y cada proceso difícil tiene un propósito.
Una historia que lo cambió todo
Recuerdo un día en el que todo me salió mal. Perdí un proyecto importante, discutí con alguien que amaba y terminé la jornada con una sensación de vacío. Esa noche, mientras miraba por la ventana sin luna, oré con un corazón cansado.
Al día siguiente, el cielo amaneció gris, pero dentro de mí algo cambió. No era el clima; era mi perspectiva. Comprendí que el sol no había desaparecido, solo estaba detrás de las nubes. Desde entonces, cada vez que enfrento un mal día, recuerdo esa lección.
Cómo recuperar tu luz interior
A veces solo necesitas hacer una pausa, respirar y reconectar con lo esencial. Aquí tienes algunos pasos prácticos para volver a encender tu luz:
- Ora sinceramente, incluso si no sabes qué decir.
- Rodéate de personas que te inspiren y te levanten.
- Lee palabras de esperanza, como los Salmos o proverbios motivadores.
- Cuida tu cuerpo y mente con descanso y gratitud diaria.
- Da un paso de fe, aunque sea pequeño.
Cada una de estas acciones te ayuda a disipar las nubes poco a poco.
El poder de una nueva perspectiva
En lugar de preguntarte “¿por qué me pasa esto?”, intenta preguntar “¿para qué?”. Quizás este tiempo difícil esté preparando algo nuevo, una oportunidad, una reconciliación o una transformación interior que todavía no puedes ver.
“El amanecer no se retrasa; solo espera el momento perfecto para mostrarse.”
Así es la esperanza: puede parecer ausente, pero siempre está al acecho, lista para iluminar cuando menos lo esperas.
Recuérdalo cuando sientas que no hay luz
No dejes que un día oscuro te haga olvidar todos los amaneceres que ya has vivido. La vida tiene ciclos, y cada uno cumple su propósito. Lo que hoy parece una pérdida, mañana puede convertirse en una lección invaluable.
Cada prueba que enfrentas está forjando una historia más profunda dentro de ti. Cuando el sol vuelva a salir, lo verás con una gratitud renovada.
El sol siempre regresa
Hoy quizás no salió el sol, pero eso no significa que se haya ido. A veces, Dios permite los días nublados para recordarnos que la fe no depende de lo que vemos, sino de lo que creemos.
Mantén viva la esperanza, confía en el proceso y recuerda: el sol siempre vuelve a brillar.
¿Y tú? ¿Qué haces cuando tu día parece oscuro?

¡Gracias Dr. Contreras! ¡Gracias RENUEVO DE PLENITUD!
Con mensajes como este me reanimo. Sigo creyendo que no ha llegado el momento en que Dios diga cómo se resuelve mi problema. Hoy me siento en la oscuridad, pero creo que Él sabe que es mi mente la que ve el día así.
Aunque toda la noche llovio para mi…pues cuando abri los ojos en la manana y me di cuenta de mi triste realidad…di gracias a Dios porque es cierto que hay problemas en la vida…y que estoy enfrentando uno ahora mismo…pero tengo un problema que me hace ver que el dia esta nublado…mas sin embargo tengo mil razones de saber que Dios estara alli para mi no importa lo que pase…No hay perfection en esta vida y tarde o temprano tenemos que enfrentar algun problema…Dios lo permitio por que detras de todo esto hay un proposito…debemos ser fuertes y sujetarnos fuertes de la mano de Dios para no perder la Luz que nos alumbrara por el resto de nuestras vidas…esa Luz jamas perdera su brillo…Gracias Padre celestial por todas las pruevas de mi vida son dolorosas pero uno aprende y gracias a este mejora. Debemos saber levantarnos y con mas fuerzas especialmente cuando somos inocentes y victimas de los demas…te Amo Padre!
grasis DIOS por este momento de goso q es de mucha vendicion para mi vida lo mejor q meapasodo es conoserte y esperimentar tu goso por eso espero todas las mañanas ese tienpo q tengo contigo para conoser mas de ty y de my grasias por tan linda cansion Dios vendiga a todas las personas q partisipamos de su mesa y oremos por las q no lo conosen un fuerte Abraso paratodos los Hem en cristo y q tengan un muy lindo Dia
Claro que vemos su rostro cada día. Esta semana Dios mostró su amor como siempre lo hace. Después de orar con muchísima fé, ayunar y pedirle con todo nuestro corazón un milagro, El lo concedió en la vida de nuestra hermana Juanita Mojica a quien le habían detectado signos de cáncer en el hígado y resultó negativo. ¿no es ése su rostro de misericordi y amor? ¡¡¡¡GLORIA A DIOS!!!!!!!!!.Que El les bendiga mucho y……..Animo Marina, yo también estuve así y El me rescató.
SEÑOR SI NO TE TENGO A TI, SIENTO QUE MI VIDA NO TIENE NINGUN SENTIDO…….GUIAME POR EL CAMINO DEL BIEN ILUMINAME……GRACIAS POR TU MISERICORDIA……ME FORTALECES MI DIOS…..AMEN.