“Porque yo, el Señor no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos” Malaquías 3:6.
Muchas cosas cambian cada día. No todo el igual. Cambia el clima, cambian los amigos, cambia la familia, cambian las esperanzas y los sentimientos. Lo que ayer parecía duradero, hoy ya parece débil. Cambian los sistemas y cambian los gobiernos.
Cuando veo todos esos cambios y veo cambios en mi mismo, tiendo a preocuparme, porque en lo profundo de mi ser no quisiera que nada y nadie cambiara. Pero todo cambia.. Todo?. No..No…gracias a Dios que no todo cambia. Hay alguien quien jamás cambia.
Dios no cambia, el es el mismo ayer, hoy, y por los siglos. Oh, Que seguridad me da eso. Saber que Dios no cambia.
Cuando las cosas cambian, los corazones se estremecen. Cada vez que me informan que cambiaran al jefe, me pregunto que si ese cambio me afectará. Cuando cambian los profesores o los gobernantes, el pueblo y los estudiantes se preguntan y ahora qué.
Pero Dios no cambia. Primero él es el único y no hay otro, de manera que nunca recibiré una noticia que Dios fue cambiado por otro y en segundo lugar además de que él es el único….nunca recibiré la noticia que él ha cambiado de parecer. Porque él nunca cambia y por ello él dice..porque nunca cambio, por eso no habéis sido consumidos.
Que gran lección aprendo del Padre celestial. La lección de inmutabilidad, lo que me transmite confiabilidad. Mientras el mundo a mi alrededor cambia y yo mismo cambio, levanto mi cara al cielo y marcho firme diciendo, pero yo sé que mi Dios no cambia.
“Señor, gracias por que en este día me recuerdas que tu no cambias. Cuán pronto soy para olvidar esta verdad. Ayer cosas nuevas y hoy ya son viejas y el mundo me ofrece nuevas ideas y nuevos movimientos, pero mi corazón reposa confiado, porque tú eres el mismo ayer, hoy y por los siglos.
Los historiadores nos dicen que aun la iglesia cambia de siglo en siglo y los conceptos morales cambian, pero tu palabra me dice que tu jamás cambias. Tu amor sigue brillando para nosotros al igual que al principio y se que brillará con la misma intensidad mañana. Hoy te agradezco padre, porque aun el cielo y la tierra pasaran pero tú no cambiaras.
Agradecidos estoy por tu inmutabilidad.
Amen.
Dr. Serafín Contreras Galeano
www.SerafinContreras.com
Dios les bendigaaaaaaaaaa como puedo ser escritora de renuevo heee me encantaria si, soy pastora y adoradora
hola me ha encantado esta pagina me es de bendicion me gusto esa refleccion de que dios no canvia que la escrivio jehovayavhe dices que el señor es el mismo y es una realidad el es nuestro ayudador y nuetro salvador y aunque sintamos el mundo cayendonos encima el esta ahi con su amor y aunque nos apartemos el sigur cuidando de nosotros tambien los milagros que antes sucedieron en el ministerio de jesus esos los veremos y mayore dice su palabra porque el no cambia gracias por esas palabras
señor de los cielos y la tierra gracias infinitaS te doy por permitir que cada dia existamos gracias a tu amor incondicional te alabo, te bendigo y te glorifico por ser incambiable e incansable te pido paz , amor y gracia para este mundo que en un segundo cambia de pensamientos mil veces.
te pido padre amado que permitas que nuestro corazon y nuestra mente cambien pero solo lo malo por cosas buenas.
alabado seas por siempre señor Dios Rey Celestial.
Amen
Acosta: dios le bendiga a todos; pero la verdad si tiene razon, la reflexion que todos cambia, y le doy gracias a dios por que todavia nos ama y saludos a todos y dios le bendiga………..
Dr. Serafìn: Dios lo bendiga mucho junto con su familia, su iglesia, su ministerio.
El mensaje :”Dios no cambia, me ha llenado de mucha alegrìa, paz y seguridad, ya que no tenemos nada que temer, pues ese mismo Dios que en el Libro de Gènesis nos prometiò un redentor, es el mismo que hoy habita por la fè en nuestros corazones, el que ha perdonado todos nuestros pecados, el que nos està preparando un lugar en los cielos, el que nos dice: “no temas, si dios contigo, quien contra tì? El que nos dice: “nunca te dejarè, jamàs te desampararè; el que nos asegura que si vivìmos bajo su protecciòn y amparo moraremos seguros bajo las sombras de sus alas (salmo 91) . Y todas las demàs promesas y declaraciones escritas en su Palabra y què seguridad nos dà saber que El no cambia, que permanece fiel que todo lo que dice es verdad, pues todas sus promesas son: en El “sì” y en El “amèn”. Y viene pronto por su “Iglesia, hecha por su sangre que es su vida.: “santa, sin mancha, sin arruga y sin contaminaciòn, sellada por el Espìritu Santo para el “dia” de su total redenciòn. ¿Còmo podemos corresponderle? Yo quiero ser igual que El, no cambiar en esa meta que me he fijado. servirle, con todas las fuerzas de mi ser, tratar de mejorar cada dìa con su ayuda en mis defectos y debilidades, para agradarle solo a El: sentir como El, mirar como El, amar como El, ser cada dìa màs El.
Oh Señor, te amo, sè que con tu ayuda voy a lograr ser como tù, te necesito cada dìa màs mi amado y fiel Señor y estando en tus brazos me siento segura. Abrâzame Señor, escondeme en tì y ayudame para que no me aleje jamàs de tì. Te estoy esperando.
¡VEN PRONTO MI SEÑOR!.