El poder de asumir la responsabilidad
Las excusas son como muros invisibles que nos impiden avanzar hacia nuestros objetivos.
Desde tiempos antiguos, el ser humano ha buscado refugio en ellas para evitar enfrentar la realidad.
Sin embargo, Dios nos llama a ir más allá de las excusas y a asumir la responsabilidad de nuestras acciones.
¿Por qué recurrimos a las excusas?
Las excusas nos brindan una falsa sensación de seguridad.
Nos permiten justificar nuestras fallas y evitar el dolor de enfrentar nuestras debilidades.
Sin embargo, vivir en un constante estado de justificación nos aleja de la verdad y nos impide crecer.
Las excusas en la historia bíblica
Desde el huerto del Edén, el ser humano ha utilizado excusas para evadir la responsabilidad.
Adán culpó a Eva, y Eva culpó a la serpiente.
Este patrón se repite a lo largo de la historia, mostrando nuestra tendencia a evitar la culpa.
El llamado de Dios a la responsabilidad
Dios nos invita a asumir la responsabilidad de nuestras acciones y a dejar de lado las excusas.
Solo cuando reconocemos nuestras fallas y buscamos su guía, podemos experimentar una transformación verdadera.
Testimonio personal: Superando las excusas
Recuerdo una época en mi vida en la que constantemente buscaba excusas para no avanzar en mi carrera profesional.
Siempre había una razón para no tomar decisiones importantes.
Sin embargo, al entregar mis miedos a Dios y asumir la responsabilidad de mis acciones, comencé a ver cambios significativos en mi vida.
Pasos prácticos para dejar atrás las excusas
- Reconoce tus excusas: Identifica las áreas en las que tiendes a justificar tus acciones.
- Asume la responsabilidad: Acepta que tus decisiones tienen consecuencias y que eres responsable de ellas.
- Busca apoyo: Rodéate de personas que te animen y te desafíen a crecer.
- Ora por dirección: Pide a Dios sabiduría y fortaleza para enfrentar tus desafíos sin excusas.
- Actúa con fe: Da pasos concretos hacia tus metas, confiando en que Dios te guiará.
Cita inspiradora
“No se puede escapar de la responsabilidad del mañana evadiéndola hoy.” – Abraham Lincoln
Reflexión final
Las excusas pueden parecer inofensivas, pero tienen el poder de detener nuestro crecimiento y alejarnos de los planes que Dios tiene para nosotros.
Al asumir la responsabilidad y confiar en su guía, podemos superar cualquier obstáculo y avanzar hacia una vida plena y significativa.
¿Estás listo para dejar atrás las excusas?
Te invito a reflexionar sobre las áreas de tu vida en las que las excusas han tomado el control.
¿Qué pasos puedes dar hoy para asumir la responsabilidad y avanzar hacia tus metas?
Comparte tus pensamientos y experiencias en los comentarios.
De esto habla Serafín Contreras Galeano en este video:

Excusas!!!! podría decirse que casi son inherentes al ser humano. De ahí que constantemente debemos confrontarnos con nosotros mismos y ser sinceros y pedir al Señor sabiduría para desechar toda excusa y asumir responsabilidades, que es lo que Dios quiere para que haya crecimiento en nuestras vidas.
Gracias por las palabras que acabo de escuchar, me reconfortan y me llenan de esperanza para recibir lo que Dios me tiene preparado para màs adelante. Gloria a Dios!!!
gracias hermano por esa lindo mensaje q me ha echo pensar de q no debemos poner escusas ante dios q solo debemos decirle si por q el lo puede todo cuan grande es mi senor q cada dia me da ensenanzas nueva para nuestras vida q dios los bendiga
Gracias pastor Serafin Contreras G……recibo sus bendiciones nuevamente……Yo si quiero y se que mi vida cambiara sera diferente en el nobre del señor……amen.
Un fuerte abrazo.
Gracias a Dios porque en medio de este mundo de confusión y tinieblas espirituales la palabra de Dios sigue siendo lámpara y lumbrera a nuestro camino. Que bueno es que existan recursos como este que exaltan la grandeza de Dios y al mismo tiempo invitan al creyente (y aún al incrédulo) a voltear la mirada a lo alto. Deseo que el señor Jesucristo les siga dando la gracia para continuar con esta bonita labor.
Gracias hermano Serafín Contreras y a todos sus colaboradores, ¡Dios los siga usando!
Atentamente,
Rubén Estrada
(Chihuahua,Chih, Mexico)