Devocional - Recordar“Pues la Escritura dice: Quién conoce la mente del Señor? Quién podrá instruirle?. Sin embargo, nosotros tenemos la mente de Cristo” I Corintios 2:16

Hoy daré atención a aa educación espiritual, porque ya mucho he hecho tras la educación secular. Gracias doy por la educación secular porque me prepara para enfrentar la vida de abajo con mayor pericia y experiencia, pero ella no me prepara para lo más elevado…para lo eterno, a veces la educación de abajo se opone a la de arriba y estima el entendimiento espiritual como sin sentido, así lo expresa Pablo.

Solo Dios puede enseñar lecciones espirituales a sus hijos y esas lecciones son aprendida no en la mente más enseñadas en el corazón en la vida interna de sus hijos por el Espíritu Santo.

Cuando el Espíritu me enseña èl me ilumina y cuando me ilumina me enseña lecciones que jamás serán aprendidas por el entendimiento humano ni por la educación secular. Leer la Biblia es bueno y es un ejercicio espiritual en la que forma parte tanto el corazón como la cabeza , más estudiar la Biblia con el espíritu dispuesto y meditar seriamente es estar en línea con el Espíritu Santo quien ha de enseñarme las profundidades de Dios.

Los hombres claman oír entendimiento, pero no hay entendimiento sin iluminación y no hay iluminación sin el Espíritu Santo. Cuando el me revela la verdad, la Biblia viene a ser maravillosamente relevante y deja de ser simplemente histórica y distante.

Con que mente voy a entender lo revelado por el Espíritu?. Hoy debo recordar que Dios me ha dado el entendimiento de Cristo y el Espíritu del Señor me iluminará. Cuando el Espíritu me ilumina no solo me revela la verdad de Dios sino que las lecciones que me enseña vienen a ser pertinentes como si mi problema tuviera la atención especial del cielo.

Cuando la Biblia es mi comida, mi gozo y mi deleite esto quiere decir que yo he pasado del plano intelectual a la comprensión espiritual y he tenido un encuentro con la persona viviente de Jesús. Hoy quiero estar en ese plano.

Señor. Gracias porque tú has ocultado las cosas tuyas a los sabios y a los entendidos y se las has revelado a los niños y a los sencillos, a los que se acercan a ti con hambre y disposición. Hoy, recuerdo que me has dado a tu Santo Espíritu pero además me has hecho participe de la mente de Cristo , hoy quiero abrir mi corazón y dejarme formar por la obra de tu Espíritu.

Quiero pasar del plano meramente intelectual al plano espiritual, allí donde tu Espíritu manifiesta su poder y acomoda lo espiritual a lo espiritual..allí donde se pueden ver las coas que ojos no han visto ni han subido en corazón de hombre. Gracias, porque tu eres mi Señor y mi maestro. Amén.

Dr. Serafìn Contreras Galeano.
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