¿Le satisface al Omnipotente que tú seas justo? ¿Le aprovecha de algo que tú hagas perfectos tus caminos? Job 22:3

La gracia no es sólo una gran bondad realizada a alguien, sino también es la condición en la que ellos quedan. Eso que es verdadero acerca de ellos o de su situación que ahora es diferente como resultado de lo que alguien más hizo. Es ambas cosas, una “acción favorable” y “el bienestar, deleite o beneficio producido por la acción.” Por ejemplo, por gracia un desconocido te da sus boletos sin usar para un parque de diversiones, y tú terminas haciendo muchas más cosas de las que te lo habría permitido tu presupuesto.

Un campeón pelea a tu favor contra un oponente que es demasiado fuerte para ti, y ese acto de gracia te salva de cierta derrota. Alguien peleó por ti y ahora eres victorioso.

El ser un anfitrión lleno de gracia significa hacer por los invitados lo que ellos no pueden hacer por sí mismos. Piensa en algunos ejemplos específicos de lo que un anfitrión lleno de gracia hace en una comida que ofrece. ¿En qué maneras puedes imaginarte a Dios extendiendo gracia?

Las proezas llenas de gracia son las actividades favoritas de Dios. Si has estado cerca de una madre joven con un bebé recién nacido, has vislumbrado cómo Dios disfruta totalmente extender Su gracia. Al menor signo de incomodidad o necesidad del bebé, la mamá se pone en acción para alimentar, cubrir, levantar o suavemente hacer callar al pequeñito. Aunque de vez en cuando disfrute cuando otros le ayuden con su rutina de cuidar al bebé, no estará dispuesta a dejar ese papel especial. Se sentiría despojada si le fuera negada la oportunidad de cuidar de su hijo.

El cuidar de alguien que no puede cuidarse solo es la esencia de la gracia.

LA RUTINA DE ENTRENAMIENTO DE DIOS

Una forma de ver por qué Dios es tan fuerte en gracia… porque la gracia es una de sus características que más lo distingue… es examinar qué actividades lo gratifican y satisfacen más.

Él se complace en tres tipos de ejercicios repetitivos. Una y otra vez Él busca oportunidades para “hacer sus ejercicios de entrenamiento” en el mundo.
No sólo no se cansa de estas sesiones de práctica en nuestras vidas; Él realmente se llena de vigor mediante ellas. Cuando se trata de hablar de Dios o pensar en Él, siempre ten presente lo que a Él le gusta hacer la mayor parte del tiempo, hacer ejercicio:
Benevolencia, Juicio, Justicia
Ser bondadoso con nosotros.
Señalar las raíces de los problemas.
Hacer las cosas bien para nosotros.
Extendernos misericordia.
Enderezar nuestros enredos.
Arreglar situaciones que echamos a perder .
Tratarnos como a sus favoritos.
Separarnos de nuestro pecado.
Refregar todo hasta dejarlo completamente limpio.
Restaurar nuestra belleza original.
Dar instrucciones buenas y precisas.
Traer bienestar a nuestras vidas .

Como humanos, nos gusta alardear o quejarnos (el otro lado del alarde) respecto a cuán inteligentes (tontos) somos, cuán capaces (o inadecuados) somos, y/o cuántos (o qué poquitos) recursos tenemos.

Las personas sabias se jactan de la gracia de Dios y de cómo Él nos da aún más de lo que nos hace falta.

Por eso, hoy veré lo que le satisface a Dios.

Señor, Gracias porque tú mismo disfrutas de satisfacción al verme como tu hijo. Amén.

Dr. Daniel A. Brown.
Disfruta tu diario Vivir.